De vista en el programa "A dos voces" -que en realidad anoche eran una sóla por las vacaciones de
Gustavo Silvestre- la titular de la Coalición Cívica,
Elisa Carrió, volvió a cargar contra el gobierno y dijo que la administración de
Néstor y Cristina Kirchner
"está llevando adelante el mayor latrocinio de toda la historia".
Se refirió a la compra de
Enrique Eskenazi, al que relacionó con Kirchner, de parte de YPF:
"van a seguir comprando hasta quedarse con todo y recién entonces
allí van a liberar los precios de combustibles y ganar miles de millones"
, dijo que hay
"enormes ganancias para algunos con las compras de fuel oil al exterior", habló
del juego
"lo controlan con Cristóbal López, que es hombre de Kirchner" y la siguió con la
obra pública que regentea
Julio de Vido desde el Ministerio de Planificación para cerrar su visión de la
realidad actual. Lilita aprovechó, además, para reirse de
la despectiva frase que le dedicó
Anibal Fernández, respecto a que dudaba de su cordura y que tuviera "los patitos en línea".
"Me causa gracia, pero que se quede tranquilo que tengo los patitos en línea"
ironizó Carrió, señalando una realidad concreta:
"fíjense, a mí siempre desde el gobierno me contestan diciendo que estoy loca, nunca me
dicen Cristóbal López no es testaferro de Kirchner en el juego, o Eskenazi no compra por orden de
Kirchner, siempre desvían la atención a mi cordura, nunca a rebatir las cosas que denuncio".
Luego la emprendió contra el jefe de Gobierno porteño, Mauricio Macri, por el procedimiento
en el desalojo de los cartoneros el viernes pasado en el barrio porteño de Belgrano
. "¿No es Macri el que se saco la foto con la niñita en el basural y hoy expulsa a los
cartoneros, cuando su familia ha tenido toda la vida el negocio de la basura en la
capital?", dijo Carrió
Recordó de este modo cuando Macri, entonces candidato a jefe de Gobierno porteño, concurrió
al barrio de Villa Devoto, donde en un basural realizó anuncios de su futura gestión, acompañado de
una niña en situación de pobreza, con quien se fotografió.
Carrió calificó de
"una inmoralidad" el procedimiento que derivo en incidentes con los cartoneros.