La presidenta Cristina Fernández de Kirchner selló la decisión de Martín Sabbatella de declarar desiertas las licencias de televisión digital de los canales 36.2 y 27.2. En ambos casos fueron rechazadas las ofertas de Editorial Perfil, bajo argumentos que el grupo editorial confía en refutar ante la Justicia.
Mediante los decretos 2107 y 2108/2015, la jefa de Estado aprobó hoy la polémica decisión de la Autoridad Federal de Servicios de Comunicación Audiovisual (AFSCA). Hace dos semanas, el organismo de declaró “inadmisibles” las propuestas de Editorial Perfil S.A, Jorge Fontevecchia, Pensado Para Televisión (Cristóbal López) y Milone S.A (Sergio Szpolski/Matías Gafunkel).
De esa forma, la mandataria dejó allanado el camino para que sean reabiertos ambos concursos. Fuentes de AFSCA informaron a Perfil.com que el candidato a vicegobernador kirchnerista dio claras directivas para avanzar de forma exprés en las licitaciones. Tal es así que ya fue citada toda la junta directiva del organismo para el día de mañana, donde volverán a abrir la convocatoria.
La velocidad de Sabbatella para solicitar una reunión del directorio sorprendió a muchos jerárquicos del propio organismo. “Está claro que quieren dejarle firmadas estas licencias a algún empresario amigo antes del 10 de diciembre”, analizaron, en diálogo con este portal.
El concurso es similar al del mes de junio y le da la posibilidad a cualquier grupo mediático de concursar por las licencias de televisión digital.
El argumento que esgrimió AFSCA para rechazar a Perfil fue que en las propuestas de la editorial “no se detallaron los pasivos patrimoniales”. El grupo periodístico refutó ese planteo: en la Revista Noticias publicaron las mismas declaraciones que figuraban en el pliego, y alertaron que una de las dos presentaciones fue efectuada por una persona jurídica sin pasivo alguno.
Por eso, el tema fue judicializado y la Editorial Perfil advirtió que podría llegar a intervenir la propia Corte Suprema de Justicia. Lo cierto es que mañana por la mañana, Sabbatella hará valer su mayoría en el directorio para reabrir los concursos y darle un veloz tratamiento al caso.
“Había una decisión política de no darle las licencias a Perfil y los otros grupos empresarios presentaban muchas irregularidades; por eso las declararon desiertas, para reabrirlas después y darles tiempo a adecuarse”, razonaron desde el organismo.
El viernes pasado, Editorial Perfil elevó un escrito al presidente del directorio para que el dictámen de rechazo de los concursos sea revisado.
