El desfile de nombres de futuros detenidos comenzó a sonar en los tribunales federales. Es que Julio De Vido y Amado Boudou son los nuevos ocupantes del sistema penitenciario, pero todos se preguntan quién será el próximo. Incluso, entre algunos habitantes de Comodoro Py ya empezaron a correr las apuestas. La semana pasada, los rumores acechaban a Cristóbal López. Se hablo de un intento de venta de sus empresas cuando pesan medidas de inhibición sobre sus bienes, sospechados ilícitos. López está siendo investigado por unos 8 mil millones de pesos que cobró del impuesto al combustible. Ahí tambien esta imputado el ex jefe de la AFIP Ricardo Echegaray. La Cámara de Casación debe resolver si el delito fue fraude o evasión, pero no sería en los próximos días. El dato no es menor: determinará a qué juzgado le corresponde investigarlo y si el empresario puede “zafar” de sus complicaciones penales pagando una multa, algo a lo que se opone la querella de la AFIP. Pero Cristóbal López también está acusado de haber integrado una banda que comandaba la ex presidenta Cristina Fernández y sus hijos Máximo y Florencia Kirchner, en el marco de la causa Los Sauces. Ahí fue procesado y según pudo saber PERFIL esta semana la Sala I de la Cámara Federal resolvería si confirma los procesamientos que dictó el juez Claudio Bonadio. Habrá que prestar atención a la situación de Cristóbal López. De todas maneras, la confirmación del fallo de Bonadio implicará que la causa sea remitida al juez federal Julián Ercolini, con vistas a una elevación de juicio oral. Serán más problemas para Cristina Kirchner, otro de los nombres que suenan en la lista de posibles próximas detenciones. Ahora Cristina tiene fueros legislativos con su condición de senadora electa, pero los criterios que disparó el fallo de la Cámara Federal para detener al ex ministro Julio De Vido y al ex vicepresidente Boudou hacen creer que serían aplicables también para la ex presidenta. Aún falta que Bonadio le resuelva la situación procesal en la causa por encubrimiento a Irán por el ataque a la AMIA. Por lo pronto esta procesada en varias causas de corrupción. Ya quedo a un paso del juicio oral por la obra publica y este jueves además deberá enfrentar una indagatoria por la causa Hotesur. Ademas, el juez Sebastian Casanello debe resolver qué hará con ella en la causa por la ruta del dinero K, que también se encaminó esta semana para ir a juicio oral. Otros, en cambio, ponen sus fichas a la figura de Máximo Kirchner a la hora de especular con futuras detenciones. También diputado nacional y líder de La Cámpora, el primogénito de Néstor y Cristina quedó en la mira por ser el que manejaba todos los números de la empresa Los Sauces. “En un momento estuvo muy complicado”, admitió a PERFIL una fuente consultada. Después, hubo una rectificación en sus declaraciones patrimoniales que podrían haber disminuido su situación. Pero en rigor nadie está seguro. Sería un estocada dolorosa para la ex presidenta si avanzan sobre su hijo. En tanto, Luis D’Elia, el piquetero que fue funcionario del Gobierno K, hizo público que temía por su inminente arresto. Fue así que apuró un planteo de eximición de prisión en la causa del encubrimiento a Irán. Mientras tanto, una fiscal pidió cuatro años y ocho meses de cárcel por la toma de la comisaria 24, en 2004.
Casación define una condena a Menem El ex presidente Carlos Menem (87 años) podría convertirse en las próximas semanas en uno de los nombres políticos que integren la nómina del Servicio Penitenciario. Es que la Cámara Federal de Casación Penal debe resolver si confirma una condena dictada a fines de 2015 en su contra a 4 años y medio de prisión por peculado a raíz de los sobresueldos que recibían funcionarios de su gabinete. Si se confirma aquel fallo y se le rechaza un recurso de apelación a la Corte Suprema, el Tribunal Oral Federal 4 –que lo había condenado- reactivará su pedido de desafuero que deberá tratar el Senado. En tanto, otra sala de Casación lo tiene en la mira. Por orden de la Corte debe revisar la condena a siete años de cárcel que le impartieron por contrabando de armas. Mientras tanto, Menem asiste a los alegatos por el encubrimiento a la causa AMIA y el desvío de la pista siria. De todas maneras, nadie cree que Menem pueda terminar en prisión. Por su edad y su salud recibiría un arresto domiciliario. Ya estuvo preso en una casa –la de su amigo Armando Gostanian- cuando lo detuvieron en 2001 por el contrabando de armas.
