Ya decidido a candidatearse en las elecciones presidenciales de 2015, el gobernador cordobés, José Manuel de la Sota, pidió hoy a la presidenta Cristina Fernández de Kirchner que convoque a mandatarios provinciales y dirigentes de la oposición para buscar un "acuerdo" que acompañe el final de su gestión. Que "tengamos un año en paz en el que se pueda votar con tranquilidad", pidió De la Sota.
Asimismo, le reclamó a la jefa de Estado que "baje el tono de su actitud que trate de terminar su gestion de la mejor manera con un acuerdo entre los distintos sectores", durante una entrevista en radio Continental.
"Este gobierno no ha sabido resolver problemas serios, nos ha llevado por un mal camino internacional", dijo el mandatario a radio Continental y advirtió que "los únicos dos países que no andan bien en la región son los gobernados por el chavismo, Venezuela y Argentina". La comparación de De la Sota no es casual. Según publica hoy diario PERFIL, el cordobés contrató al publicista venezolano Juan José Rendón, conocido en el ámbito político tanto por su audacia como por la agresividad para implementar campañas “sucias” contra otros candidatos.
Rendón organizó las campañas de Juan Manuel Santos en Colombia, de Enrique Peña Nieto en México, y fue un estrecho colaborador de Henrique Capriles, en las elecciones de Venezuela, lo que lo llevó a enfrentarse en duros términos con el chavismo. Incluso el propio Nicolás Maduro, sucesor de Hugo Chávez, lo calificó como el “enemigo público número uno de Venezuela”. El mandatario venezolano solicitó a Interpol la captura internacional de Rendón por un caso de “violencia de género”, pero nunca trascendieron demasiados detalles. Pero no es el único episodio en el que Rendón estuvo involucrado en una polémica, porque en la última campaña del presidente colombiano Juan Manuel Santos, debió renunciar acusado de recibir 12 millones de dólares de parte de Luis Enrique Calle Serna, alias “Comba” o “Combatiente”, uno de los capos narcos más temidos de Colombia.
Los dichos del gobernador se suman al discurso que profiriera ayer, en los festejos por el Día de la Lealtad peronista. "Quiero ser el Presidente del diálogo para terminar con la desunión de la Argentina. Si pudimos en Córdoba, intentaremos hacerlo en la Nación", afirmó.
