–La semana pasada me dijiste que Ofelia estaba en Olivos. ¿Estaba o no estaba? –¿En dónde? –En Olivos. –Sí. –Porque dijeron que estaba acá (en su casa de Tolosa). –Estaba en Olivos, ¿no viste que no estaba el auto? Si no está el auto, no está ella.
Esta conversación forma parte del diálogo que PERFIL mantuvo con el custodio de la madre de Cristina Kirchner, Ofelia Wilhelm, después de que el Gobierno desmintiera la información publicada sobre su partida a la Quinta de Olivos. De esta manera, el agente de seguridad –de quien este diario reservará su identidad– confirmó la información. La conversación continuó:
–Pero salió Parrilli a través de un comunicado a decir que era mentira que estaba en Olivos. –A menos que sepa más que yo, que estaba acá... –¿A vos te dicen todo? ¿A dónde va, cuándo vuelve? –Claro, es fácil. Si vos ves el auto verde es porque está acá.
En su edición del sábado 6 de abril, PERFIL publicó que después de la inundación en La Plata, donde vive Ofelia, el jueves fue trasladada a la Quinta presidencial. Esta información había sido brindada por los custodios de la propia Wilhelm y vecinos que la vieron trasladarse en el auto oficial.
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Sin embargo, el mismo sábado, el secretario General de la Presidencia, Oscar Parrilli, desmintió la nota publicada al sostener a través de un comunicado que Ofelia no estuvo en Olivos. “Informamos que es absolutamente falsa y de mala fe”, sostuvo Parrilli sobre la publicación. Ese día, PERFIL volvió a la casa de Ofelia en el barrio de Tolosa y fue recibido por otro custodio, quien aseguró: “Es mentira lo que se dice por ahí, Ofelia está en la casa” y pidió abandonar la guardia. Este diario solicitó tocar el timbre y corroborarlo, aunque no lo logró. A lo largo del día, a pesar de la insistencia, los ocupantes de la casa se negaron a demostrar, tal como había asegurado el Gobierno, que la madre de la Presidenta permanecía en su vivienda de la calle 522 bis entre 7 y 8.
“¿Por qué la habrían evacuado el jueves, si la inundación, que además no llegó a afectar las casas de la cuadra donde vive, fue el martes 2 de abril y el jueves no sólo se habían escurrido las aguas, sino que además había retornado la luz y el agua?”, manifestó Parrilli.
Esta información había sido aclarada en la misma nota cuando se explicó que la calle de Ofelia fue una de las únicas de Tolosa que no se había llegado a inundar por tener una pendiente en la esquina. También se había consignado que su llegada a Olivos, habría tenido que ver con el enojo de los vecinos por los daños que dejó la lluvia y la inasistencia del Estado.
El miércoles 3, un día después de la inundación, la propia Cristina Kirchner fue recibida con insultos de vecinos en su barrio. El jueves, el día que fue trasladada Ofelia, también abuchearon a la ministra Alicia Kirchner y al gobernador Daniel Scioli.
