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El dueño de Covelia invirtió millones en proyectos inmobiliarios

Conozca el último negocio de Ricardo Rubén Depresbíteris, sospechado de ser testaferro de Hugo Moyano. Las cifras. Galería.

Depresbíteris invirtió en el negocio inmobiliario. Fotomontaje
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Algo que los economistas recomiendan a quien tiene dinero para invertir en la Argentina es apostar al sector inmobiliario. Ricardo Rubén Depresbíteris lo entendió muy bien. El dueño de Covelia y sospechado de ser el testaferro de Hugo Moyano apostó a los ladrillos. Según pudo confirmar Perfil.com, tiene participación accionaria en CANFOT S.A., empresa que adquirió los terrenos para desarrollar “Forum Alcorta” en la zona de Belgrano.

Con esto queda claro que a Depresbíteris no le importa sólo recolectar basura. También sabe muy bien donde colocar el dinero que obtiene de ese negocio.

Porcentajes. Depresbíteris no está solo. El posee el 24,96% de Canfot, en tanto que el 75,04% restante es propiedad de TGLT, empresa dedicada al desarrollo de emprendimientos inmobiliarios residenciales de importancia, destinados al segmento medio-alto y alto de la población. La misma está dirigida por el empresario Federico Weil. Según el informe realizado por el auditor externo de TGLT, Gran Thorntonse, el capital de Canfot a diciembre de 2010 es de $ 48.238.100, por lo que Depresbiteris tiene $12.040.229,76 invertidos allí.

Forum Alcorta está ubicado en el Bajo Belgrano, entre las calles Juramento, Castañeda, Echeverría y Ramsay. Presentará dos torres residenciales que se complementarán con un grupo de townhouses y 8.600 m2 de áreas parquizadas. La zona es una de las más exclusivas de la capital. Queda a menos de diez cuadras del estadio de River Plate y a metros de la avenida Figueroa Alcorta. Si bien hay otros proyectos en las inmediaciones este es uno de los más ambiciosos.

A través de un comunicado institucional enviado a este portal, TGLT, constituida en 2004,  explicó que “Ricardo Depresbíteris no tiene nada que ver con ninguno de los otros edificios en desarrollo (más de 50), ni con TGLT”. Esto fue a raíz de versiones periodísticas que aseguraban que el dueño de Covelia también había invertido en el proyecto “Forum Puerto Madero”, algo que la empresa de Weil negó categóricamente.

La empresa se apresuró a dejar en claro que la participación de los inversores es “absolutamente pasiva” y que no tienen ninguna intervención en el desarrollo”

Por último, añadieron que “TGLT se encuentra en la etapa final de negociación con éste y otros inversores para la recompra de sus participaciones. También es de público conocimiento dentro de la industria que el Sr. Depresbiteris invirtió en otros proyectos inmobiliarios en distintas partes del país”.

A pesar del comunicado, lo cierto es que el dueño de Covelia aún posee una importante participación accionaria en el proyecto.

De mendigo a millonario. Según informó el Diario Perfil el crecimiento de Covelia S.A. comenzó en 2002 en el conurbano gracias a su alianza con el camionero Hugo Moyano. El primer contrato fue en Lomas de Zamora. Hoy maneja el negocio de la basura en otros 11 municipios de la provincia de Buenos Aires: Bahía Blanca, Escobar, Esteban Echeverría, La Costa, Lanús, Merlo, Pinamar, Quilmes, San Martín, San Miguel y Tres de Febrero.

Fue Carlos Vázquez, gerente comercial de Covelia, quien explicó el año pasado que la empresa tiene un patrimonio de $ 500 millones y que sólo en 2009 facturó $ 290 millones. En ocho años, la recolectora pasó de 220 empleados a 2.600. Todos están afiliados a Camioneros.

“Champancito”, apodo que se ganó por su devoción al champagne,
tiene 48 años y es oriundo de Villa Obrera, también conocida como Monte Chingolo, un barrio de clase mediabaja de Lanús, en el sur del Conurbano bonaerense.

En diez años, se hizo millonario y adquirió un jet privado, un yate, un Porsche, un Mercedes Benz, un piso en Puerto Madero, y varias compañías. Está casado con Elvira Marcela Mete, quien también figura en el directorio de Covelia y en la titularidad de la cuenta bancaria que investiga la Justicia de Suiza. Este portal envió preguntas a ejecutivos de Covelia pero aún no fueron respondidas.