La presentación de Stornelli incluyó a una veintena de ex funcionarios, entre ellos Juan Ignacio Forlón, quien también fue titular del Banco Nación, según consignó la agencia DyN.
La denuncia la formuló en un principio Margarita Stolbizer, quien amplió su presentación luego de que Leonardo Fariña declarara, en calidad de arrepentido, en la causa "La ruta del dinero K", sobre una serie de maniobras que vinculaban los negocios de Báez con el gobierno de los Kirchner.
En su declaración, Fariña detalló sobre un fideicomiso en el que él intervino por pedido explícito de Báez, quien lo envió a reunirse directamente con Fábrega, quien ocupaba en aquel entonces el puesto de presidente del Banco Nación. El objetivo era crear un fideicomiso de 350 millones de pesos donde se colocaron como garantías certificaciones de obras de Austral y Kank & Costilla.
Stolbizer sostuvo en su denuncia que "Báez recibió un trato preferencial por parte del Banco Nación, pese a que sus empresas nunca cumplieron con la normativa exigida en relación a la prevención de lavado de activos y presentaba documentación incompleta y con irregularidades".
Según dijo, el Nación le permitió a Austral Construcciones que su descubierto "aumentara a ritmos millonarios al tiempo que se le otorgaban créditos a bajo interés", pese a los "excesos en los límites acordados para adelantos en cuenta corriente", y mientras "llamativamente se demoraban en la actualización de la calificación como deudores y gestión crediticia"
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