POLITICA
ANALIZAN POSIBLES TRABAS

El Gobierno, furioso con el plan de Clarín para donar Cablevisión

La idea es que se quede en manos de los hijos de algunos accionistas del grupo.

Sabbatella. Debe decidir también sobre el futuro de Telefe.
| Pablo Cuarterolo

“No van a poder poner ni un dedo dentro de Cablevisión”, responde, amenazante, un funcionario del gobierno nacional que debe aprobar el plan para cumplir con la Ley de Medios que presentó el Grupo Clarín.

La advertencia alude a la posibilidad de que la compañía enemistada con el oficialismo realice una donación de parte de sus activos a los hijos de algunos de los accionistas del grupo.

Posibilidad que se evalúa dentro de la empresa y que adelantó el diario PERFIL en su última edición, entre otras alternativas en estudio.

En la semana, el titular del organismo que debe hacer cumplir la Ley de Medios (Afsca), Martín Sabbatella, disparó: “Nadie se va a burlar de la ley, nadie se va a burlar del Estado. Todos los mecanismos estatales están en funcionamiento y trabajando en forma articulada para que nadie eluda el cumplimiento de la ley”.

¿A qué se refería? Esencialmente a que la Afsca no aprobará un plan de adecuación del grupo si efectivamente busca una reorganización accionaria donde los nuevos titulares sean herederos de los accionistas actuales. Para el Gobierno sería una operación ilegal.

Además, fuentes oficiales confirmaron que es necesario esperar que el multimedios presente la lista oficial de los nuevos “titulares” de las seis empresas en las que se dividirá.

El Gobierno espera que la documentación llegue a la Afsca “en los próximos días” mientras que Clarín consideran que todavía tiene varios meses de plazo y varias reuniones entre sus accionistas para ver cómo y entre quiénes dividen sus empresas. 

Aunque no está escrito en la Ley de Medios ni es su reglamentación, dentro de la Afsca aseguran que los posibles compradores de las empresas que decida vender el multimedios –no pueden tener Canal 13 y Cablevisión, por ejemplo– deben justificar el origen del capital con el que pagarían los activos.

Es decir, si efectivamente Clarín quiere venderle a algunos de los hijos de los accionistas sus activos debe lograr que demuestren que tiene los fondos para comprarlo.

Por eso, dentro de la Afsca amenazan con que enviarán el expediente del grupo a la Comisión Nacional de Valores para que analice en detalle la historia financiera de los potenciales  compradores. Lo dan como un hecho: antes de entrar, el trámite ya estará lacrado con el sello de “no aprobado”.

El otro gran tema pendiente de la Ley de Medios es el plan que presentó el grupo Telefónica. El Gobierno debe decidir si le permite a la compañía, de capitales españoles, seguir teniendo la licencia de Telefe, el canal más visto de la TV.

Existen movimientos quizás premonitorios: hace una semana, uno de los directores más importantes de esa compañía compartió un café en plena calle con uno de los directores de un holding de medios oficialistas. ¿Fue en el marco de las posibles negociaciones por la venta de Telefe?

Ayer el Consejo de Administración de Repsol aprobó en España el acuerdo por YPF. El kirchnerismo ahora tiene vía libre para decidir sobre el futuro de Telefónica, menos determinado por no entorpecer las relaciones con ese país.

Ayer los los directores por la oposición de la Afsca, Gerardo Milman y Marcelo Stubrin, pidieron precisamente que se convoque a una reunión para tratar ese tema. El Gobierno espera el momento justo para dar el golpe final.