POLITICA
Esta vez no hubo sorpresas

El Senado aprobó la reestatización de Aerolíneas

El oficialismo superó cómodamente la votación. Ahora hay que esperar la valuación de la empresa y, sobre todo, saber quién paga la deuda.

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| Cedoc

Luego de largo debate, el Senado aprobó esta noche la reestatización de Aerolíneas Argentinas. El resultado de la votación fue de 46 votos afirmativos y 21 negativos, por lo que el proyecto llegado de Diputados se convirtió en ley y la devastada compañía aérea regresa al ámbito público, sin que se conozca todavía cuánto habrá que pagar por ella y el monto exacto de la deuda. Ni siquiera se sabe el destino del acta acuerdo que el secretario de Transporte Ricardo Jaime firmó con el grupo Marsans, que el proyecto convertido en ley ignoró.

Como era esperable, el debate por la re-estatización de Aerolíneas Argentinas avivó la polémica entre el oficialismo y la oposición en el seno de la Cámara Alta. El primer senador en hablar fue el kirchnerista Eric Calcagno, quien fustigó la década del 90´: "Aerolíneas sufrió la privatización", señaló el titular de la comisión de Infraestructura y Transporte y defendió la ley porque, aseguró, "impide que se destruya las líneas aerocomerciales en Argentina".

Por su parte, el senador radical Gerardo Morales, un duro a la hora de hacer declaraciones, no faltó a su estilo cuando se opuso al proyecto enviado al Congreso por la presidenta Cristina Fernández de Kirchner, que ya cuenta con media sanción de Diputados. Cuando transitaba los primeros minutos de su alocución, Morales fue interrumpido por el kirchnerista Nicolás Fernández, quien responsabilizó a De la Rúa por el vaciamiento de la empresa.

El senador jujeño también cargó contra el secretario de Transporte, Ricardo Jaime. "El Estado argentino no controló a este grupo, especialmente el secretario de Transporte, Ricardo Jaime, que hace cinco años que está en funciones", apuntó y volvió a exponer su solución al tema: "Teníamos que haber mandado la empresa a la quiebra o crear una nueva empresa".A su vez, el presidente del bloque radical, Ernesto Sanz, resaltó que existen "acuerdos fundamentales entre el oficialismo y la oposición para tratar el tema, a diferencia del proceso de privatización de los años '90, cuando se produjeron fuertes divisiones en las dos cámaras".

Afirmó que "lo peor" del proyecto oficial es "el método de evaluación contenido en el acta-acuerdo" junto a la forma de cálculo según "el flujo de fondos a futuros" y sostuvo que "el acta favorece groseramente" a la empresa española y criticó además con dureza el secretario Ricardo Jaime.
Apoyo la formación de una comisión investigadora y dijo que el primero en ser citado debería ser el embajador argentino en Madrid, Carlos Bettini, por su responsabilidad en el las negociaciones con el gobierno español en el 2001.

El oficialista Fabián Ríos, presidente de la comisión de Presupuesto, dijo que "el vaciamiento de los activos lo hizo Iberia, antes del 2001" y criticó la propuesta de quiebra y expropiación de empresas promovida por la oposición. Ríos admitió que "el acta acuerdo está vigente, y está bien que así sea porque permite la presencia del Estado en la dirección de Aerolíneas".

La senadora porteña María Eugenia Estenssoro (Coalición Cívica) afirmó que "no es serio que se apruebe la compra de una aerolínea sin que se sepan los montos de la operación, porque la empresa no tiene balances cerrados ni auditados. Entonces, ¿qué estamos comprando?", y en seguida acotó que "el proyecto oficialista intenta blanquear la acción de Marsans".

La legisladora propuso además la creación de una compañía que se denominaría Nueva Aerolíneas Argentinas, con cien por ciento de aportes estatales, la totalidad de los empleados actuales y de las concesiones y licencias, y reclama la expropiación de todos los activos.

El socialista Rubén Giustiniani pidió la expropiación de Aerolíneas Argentinas y Austral "sin pagar un peso" y requirió una comisión investigadora de la gestión de ambas compañías y funcionarios nacionales en los últimos años y el rechazo del acta-acuerdo.

El debate lo cerró el titular de la bancada oficialista, Miguel Angel Pichetto, que defendió la reestatización como "lo único que se podía hacer para salvar a Aerolíneas Argentinas". "La presidenta Cristina Fernández ha reconocido que esto es un gran problema, que Aerolíneas pierde mucho dinero, pero lo único que podemos hacer para salvar a la compañía es esto", dijo Pichetto, rechazando que fuera posible pensar en una quiebra con continuidad, justamente "porque cualquier juez que entienda en esa quiebra no permitiría la continuidad con el déficit que la empresa tiene para funcionar".