Entrevista a Ernesto Sanz: "Ahora se investiga al poder cuando tiene poder"

El radical Ernesto Sanz, quien fue la primera elección del presidente Mauricio Macri para dirigir la cartera de Justicia, que finalmente recayó en manos de Germán Garavano, analizó el sistema judicial de la Argentina. En una extensa entrevista con el CEO de la Editorial Perfil, Jorge Fontevecchia, valoró la celebridad de los jueces tras la imputación del jefe de Estado.

— ¿Que la Justicia ahora sí procese a funcionarios y amigos del kirchnerismo no termina también indicando de que esos mismos jueces en la propia celebridad que están teniendo muestran su falencia anterior?
— La asignatura pendiente de la Argentina en la Justicia es demostrar independencia en todo tiempo y en todo momento. La verdad es que todo ciudadano hoy puede preguntarse '¿qué pasó acá?'. Lo que me da más temor de este preciso momento es de que en la Argentina hagamos en el tema este lo mismo que hemos hecho en muchas otras cuestiones que es la teoría del péndulo. Que pasemos de un extremo que era malo al otro que termina siendo malo también por sobreactuación. Creo que hay que encontrar el equilibrio en justo término, La justicia ni puede estar callada, totalmente aletargada en un momento, ni tampoco ahora puede despertarse cuando son los mismos jueces y que sea un festival de todos los días porque termina siendo poco creíble también. Quizá el camino sea el que se abre con la imputación de Macri. Se investiga al poder cuando tiene poder. Cuestiones que aparezcan en este gobierno tienen que ser investigadas en este gobierno, mientras tanto no perder de vista que hay tanto pediente de lo del anterior y tanto daño se ha hecho y ese modelo de aclamación del poder político y económico que todavía está por investigarse, hay que investigarlo.

— ¿Esa es la hipocresía de la Justicia? 
— No sé si es hipocresía. Es un defecto de funcionamiento y lo que creo que en la Argentina nunca hubo un control social de la Justicia. La Justicia siempre fue un espacio demasiado alejado de las luces y de la consideración pública. La gente comienza a darle valor cuando la injusticia y la impunidad aparece tan flagrante, tan evidente. Si no hubiera habido un video de 'La Rosadita' contando plata yo no sé si estábamos en esta situación hoy. Ahora bien, ¿era necesario?. ¿Qué pasó ahí? Que la indignación popular fue tan evidente con ese video que ahí es donde aparece a presión de la sociedad. Y donde también hay una respuesta muy buena de la Corte, y hay un goibierno que permite esto y fomenta esto. Y que no tiene operadores y que tiene transparencia y libertad para hablar de estos temas.