Con 21 años, Florencia Kirchner, la más pequeña de la familia presidencial, es más rica que todos los ministros del Gobierno. Heredó de su padre $ 15.818.958. Lo mismo le tocó a Máximo. La cuenta final da $ 31.637.916, porque se repartieron en partes iguales el 50% de lo que tenía el ex presidente.
El ministro que más declaró en su última presentación fue Héctor Timerman, de Relaciones Exteriores. Su fortuna asciende a $ 10.544.301. En la lista le sigue el de Salud, Juan Manzur, con $ 9.905.654; Francisco Larcher, de la Secretaría de Inteligencia, con $ 4.036.077; el titular de la AFIP, Ricardo Echegaray, con $ 4.009.052; y el ministro de Defensa, Arturo Puricelli, con $ 3.838.472.
Lo que más llama la atención, al hacer la comparación con el patrimonio del gabinete K, es el contraste entre lo que poseen los hijos de Cristina con su tía. La diferencia es abismal. Florencia y Máximo tienen un capital heredado 126 veces más grande que el de Alicia, la más pobre del gabinete.