POLITICA

Francisco "le dio una mano" a Tomada y sindicalistas K en pleno conflicto gremial

El ministro viajó al Vaticano junto a distintos representantes del sindicalismo.

Tomada y su mujer accedieron al palco VIP para saludar a Francisco.
| Prensa Presidencia

Si no es mediante una negociación paritaria, una buena administración económica o una eficaz gestión del Ministerio de Trabajo, quizás los acuerdos salariales en plena ebullición gremial lleguen por una bendición del Papa. Un mes después de que Diario PERFIL anticipara la visita de una delegación oficialista al Vaticano y tras la desmentida, el ministro de Trabajo, Carlos Tomada, viajó a la Santa Sede junto a sindicalistas cercanos a la Casa Rosada. 

Tomada y su mujer pudieron acceder al palco central, en la Plaza San Pedro para saludar a Francisco y cruzar unas palabras con él. Distinta fue la suerte de Gerardo Martinez (UOCRA), Héctor Méndez y Daniel Funes de Rioja (UIA), que tuvieron que aguardar casi dos horas en una Plaza San Pedro colmada de fieles para acercarse al pontífice argentino, después de su clásica audiencia general de los miércoles.

El Papa saludó a sus compatriotas con una sonrisa y le dedicó algunos minutos de conversación. Pero en la lista de saludos del Pontífice, los sindicalistas no fueron los únicos: antes, Francisco recibió un regalo de parte del exministro Daniel Filmus, entre otros tantos que le obsequiaron libros, mates, alfajores y camisetas de fútbol.

Tras el encuentro, mediante un comunicado, el Ministerio de Trabajo informó que los miembros de la comitiva le acercaron la invitación al Papa para que participe del Congreso que la Organización Internacional del Trabajo (OIT) llevará a cabo en junio en Ginebra. "La OIT considera muy importante la presencia del papa Francisco por su constante prédica en defensa de la inclusión, la igualdad, los derechos humanos y el trabajo decente a nivel global", expresaron. 

Por su parte, informó la cartera, el Papa argentino se mostró agradecido de recibir la invitación y recomendó continuar la gestión ante la sSecretaría de Estado del Vaticano para hacerse presente en Ginebra. "Los integrantes de la delegación resaltaron la férrea posición del Santo Padre en contra de todo tipo de explotación, de trata de personas y de trabajo infantil en todo el mundo", sostuvieron. 

La "bendición" del Papa a los sindicalistas llega en el momento que los funcionarios más lo necesitan: a 5 mil kilómetros del Vaticano, Hugo Moyano (CGT Azopardo) y Luis Barrionuevo (CGT Azul y Blanca) ratificaban un paro general mientras las paritarias docentes están trabadas, donde los maestros realizan el décimo quinto día de paro por tiempo indeterminado.

No pero sí. La visita de la delegación de Trabajo al papa Francisco en medio de las negociaciones salariales es una historia de anticipos periodísticos y desmentidas oficiales que, finalmente, se hizo efectiva un mes después. El 9 de febrero, Diarios PERFIL anticipó el encuentro que luego fue negado por el jefe de Gabinete, Jorge Capitanich, dos días después.