La flamante ministra de Seguridad, Nilda Garré, justificó la decisión de prohibir el uso de armas de fuego en protestas sociales y contraatacó a Mauricio Macri y a Eduardo Duhalde por sus reclamos de desalojo del tomado club Albariño. "Le digo al ingeniero Macri que estamos cumpliendo con la ley y estamos en permamenten contacto con el juez de la causa que reclamó un desalojo pacífico", le apuntó al jefe de gobierno porteño.
"No vamos a restablecer la paz como quieren Macri y un ex presidente", disparó y le pidió a los vecinos "que comprendan que hay discursos que pueden ser complicados para todos". Al mismo tiempo anunció que la Policía Federal no va ingresar "violentamente" al predio porque "allí hay critaturas".
La ex ministro de Defensa señaló que "estas normativas del no uso de armas de fuego no es un invento argentino sino que se utilizan en distintos países del mundo. El juez Rafecas indicó nuevas medidas que intentan ir logrando el objetivo de la recuperación". La funcionaria advirtió que el diálogo con los okupas ha fracasado y por eso siegue "cercado el perímetro para que no lleguen los materiales de construcción".
Garré volvió al pedido de Macri y consideró que "la irracionalidad que se propone en el uso de la fuerza pública va a traer más problemas. Nosotros simplemente recordamos que la utilización de la fuerza para reinstalar el orden deben tener los mecanismos convenientes para que el logro que se persigue no genere consecuencias más graves. Por eso le recordamos a la policía la prohibición de utilización de armas de fuego y restringimos el uso de gases lacrimògenos", insistió.
La ministra de Seguridad apuntó que en la toma del Club Albariño "hay violentos que arrojan bombas molotov o nafta a las fuerzas de seguridad. Estos violentos quieren escalar el conflicto con alguna intencionalidad.
Asimismo, Garré informó que el 17 diciembre dos policías y un civil resultaron heridos por el intento de desalojo del pequeño predio de Villa Lugano y al día siguiente fueron 22. Ayer, en tanto, cinco efectivos fueron lesionados y asistidos en el Hospital Santojani. En total, 29 agentes resultaron heridos por los okupas.
