El escenario parece ir aclarándose poco a poco en el peronismo oficialista. Tras meses de indefiniciones, y luego de la intención de un grupo de gobernadores de adelantar las elecciones locales de las nacionales por falta de un horizonte por parte de la Casa Rosada, Daniel Scioli comenzó a encolumnar detrás de su candidatura a buena parte de los mandatarios provinciales del PJ kirchnerista.
Los gobernadores de Mendoza, Tucumán, San Juan, Formosa, Misiones, Santiago del Estero, Jujuy y Catamarca ya juegan para el bonaerense; mientras Salta, Entre Ríos, Chubut y La Rioja van en el mismo camino.
Mañana Scioli jugará esa carta de poder: se mostrará con un grupo de gobernadores en Mendoza, donde el mandatario local, Francisco “Paco” Pérez, fue de los primeros en plantear que la “ola naranja” era la mejor opción. El 17 de noviembre es un día muy particular para los peronistas: se celebra el regreso al país del general Perón, hace 37 años, luego de 18 años de exilio.
Aunque la excusa formal para el encuentro con bombos y liturgia peronista será la toma del mando del PJ mendocino por parte de Paco Pérez, cuyo vicegobernador, Carlos Ciurca, trabaja para el sciolismo. Allí, en el departamento de San Martín, estarán también José Alperovich (Tucumán) y Eduardo Fellner (Jujuy), uno de los ultra-sciolistas junto a José Luis Gioja (San Juan) y Gildo Insfrán (Formosa). Incluso se podrá ver al jefe de Gabinete, Jorge Capitanich (quien busca un lugar en una lista de su Chaco natal), y a Diego Bossio (titular de la Anses), quien aspira a gobernar la provincia.
“Hay una ola sciolista que no es por amor, sino porque es lo que hay. Los gobernadores creen que ya no pueden inventar nada si no es Daniel”, describe una fuente peronista de paladar K. “Lo que están viendo es que el flaco (Florencio) Randazzo no llega y, aunque lo quieren adentro –algunos lo piensan como candidato a gobernador–, dicen que el resto no mide”, agrega la misma fuente.
El apoyo más explícito hacia Scioli comenzó a cristalizarse en las últimas semanas, justo cuando varias encuestas mostraron un leve crecimiento del gobernador. Según creen en su entorno, hay “al menos diez” gobernadores que expresaron que lo acompañarán en su carrera presidencial. Algunos de ellos esperan ser elegidos como compañeros de fórmula, otros podrían sumarse a un hipótetico gabinete y algunos simplemente necesitan un candidato a presidente que sume votos para sostener sus distritos.
“Es lógica la tendencia porque los tiempos de definiciones se acercan, y es algo que empieza a suceder en el PJ: a diferencia de otros espacios todos se terminan encolumnando con la hipótesis ganadora”, confía uno de los estrategas de la campaña “naranja”, quien recuerda que Scioli insistirá con la “unidad del PJ”.
Dos que aspiran a intentar crecer como precandidatos a presidente aún toman cierta distancia: Sergio Urribarri (Entre Ríos) y Juan Manuel Urtubey (Salta). En el sciolismo confían en que se trata de una estrategia de negociación a futuro.
