Por pedido del secretario de Seguridad Sergio Berni iniciaron sumarios a dos de los diez efectivos de la policía federal que estaban a cargo de la custodia del fiscal Alberto Nisman durante el domingo. Se trata de la primera medida que toman las fuerzas de seguridad después de la aparición del letrado sin vida, el domingo por la noche, con un disparo en la sien.
Acorde a lo que había solicitado la presidenta Cristina Fernández de Kirchner en su carta del jueves, a la instrucción sumarial a los custodios se le sumó también al superintendente del interior, jefe de los oficiales, de apellido Luna.
Según trascendió, los oficiales fueron sancionados “porque procedieron incorrectamente, sin ajustarse al protocolo y sin notificar las novedades a las autoridades como corresponde”. El Ministerio de Seguridad había informado que el fiscal Nisman dejó de responder llamados el domingo al mediodía. Por eso, horas después, buscaron a la madre del letrado para que abriera la puerta.