POLITICA

Lanata: "Podrían ganar en segunda vuelta el PRO y la UCR"

El periodista habló con CNN sobre el cambio de paradigma que debería producirse para evitar la "continuidad" y buscar "el cambio". Además, su libro "10K" y los problemas económicos.

Lanata habló de su libro y de la coyuntura actual
| CNN en Español

Para el periodista Jorge Lanata, es clave el "paradigma" con el cual se llegue a la elección presidencial de 2015, si pensando en la "continuidad" o en un "cambio". Así lo expresó en un entrevista con el programa Encuentro de CNN en Español, en donde además habló del gobierno de Cristina Fernández de Kirchner, de la situación económica actual y de su nuevo libro "10K, la década robada".

Sobre los candidatos a las elecciones 2015 expresó: "Depende del paradigma con el cual se llegue a la elección. Si se llega a la elección pensando en un cambio o si se llega pensando en continuidad".

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"Si se piensa en continuidad, a mí me parece mucho más probable que gane Scioli que que gane Massa", dijo, y aclaró: "Pero si se llega a la elección pensando en un cambio, creo que podría ganar en segunda vuelta una alianza de Macri con los radicales, que aparentemente se está haciendo cada día más concreta. Cobos dijo que quiere ir con el PRO a las elecciones lo que pasa es que eso provocaría una escisión en UNEN. Pero igual, en una segunda vuelta, el radicalismo y el PRO quizás podrían ganar".

Lanata publicó la semana pasada un nuevo libro llamado "10K, la década robada". La primera edición de 70 mil ejemplares se agotó en tres días: viernes, sábado y domingo. Editorial Planeta distribuirá una segunda tirada de 50 mil ejemplares más. Se publica en México, Colombia, España y Brasil.

Al comparar uno de los temas planteados en su libro, las décadas de los '90 con la actual y su herencia política, explicó: "En el caso de la década de Menem, fue muy complicada con cambios estructurales muy grandes y con muchos hecho de corrupción. Menem se animó a hacer lo que ni siquiera los militares se habían animado a hacer. Tomó más deuda externa que nadie, privatizó empresas públicas, y demás".

"En el caso de los Kirchner, el Gobierno se llama a sí mismo 'la década ganada'. Yo la llamo en el libro la 'década robada', pero no robada sólo por la corrupción sino porque nunca antes el Gobierno tuvo tantos ingresos a partir de la venta de commodities, y nunca antes gastó tan mal el dinero. Es muy difícil hoy decir qué pudiera haber pasado en Argentina si el dinero se hubiera gastado bien".

Y continuó: "Yo defino en el libro que los gobiernos se definen por lo que dejan. Y si vemos lo que dejan hoy los Kirchner. Una deuda externa mayor que cuando llegaron, reservas menguadas, la situación educativa horrible, a pesar de que como nunca antes se había gastado dinero en educación, pero hoy aquí la mitad de los chicos no termina el bachillerato. Y ahora nos enfrentamos a una quita de subsidios porque hemos vivido una situación económica completamente artificial, con el boleto de colectivo, el agua, la luz, mucho más barata porque estaba subsidiada por el Gobierno. Y ahora va a haber aumentos entre el 500 y el 700 por ciento. Por eso lo llamo la década robada".

Sobre si por la coyuntura económica se podría precipitar una nueva crisis, dijo: "No creo que vaya a haber una crisis económica así terminal del Gobierno, yo realmente creo que Cristina va a terminar en el momento en que tiene que terminar. No va a haber un adelantamiento del pase de poder, ni nada. Pero sí va a haber un desgaste de la situación económica bastante importante, por muchos motivos. Primero, el Gobierno devaluó en enero un 20 por ciento y después la inflación le pasó por arriba a esa devaluación, con lo cual va a tener que volver a devaluar, es cuestión de tiempo, quizás lo haga a mediados de año, quizás lo haga a fin de año".

"El humor social va empeorar cuando se quiten los subsidios a las tarifas. Porque la gente se va a encontrar con que paga un 500% más de tarifas que estaban muy baratas. A pesar de que la gente es conciente de que esto es un favor que se les hacía, a nadie la va a gustar pagar cinco o siete veces más los servicios públicos".

"Y el otro es el tema gremial, la situación paritaria, porque los acuerdos de sueldos entre los gremios y las empresas, van a quedar debajo de la inflación. Lo paradójico de esto es que un gobierno que durante diez años se pasó diciendo que no iba a hacerle caso al Fondo Monetario Internacional, que no iba a pedir dinero en el exterior, que no se iba a endeudar, y que no iba a ajustar a través del salario, hoy está haciendo todo lo contrario, está haciendo un ajuste muy ortodoxo".

Sobre a quién hay que creerle si a Capitanich que niega relaciones con el FMI o a Kicillof que viajó a mejorar las estadísticas, respondió: "Yo le creería a Kicillof que es el que viajó. Capitanich puede decir lo que quiera, hablar es gratis. El problema es qué fue a hacer Kicillof allá. Y Christine Lagarde, cuando Kicillof llegó, dijo que 'estaba encantada de verlo'. Lo que sonó a frase cínica porque obviamente Lagarde saber que Kicillof detesta el FMI pero que en este momento no les queda otra que ir ahí porque necesitan reconstituir el crédito externo".

"El problema es que el Gobierno cree que ese dinero va a llegar eventualmente rápido, y nada indica que el crédito externo llegue rápido. Los activos están muy baratos en Argentina, entonces va a haber inversiones, pero con el próximo gobierno, no con éste".