Lavagna, con “muchas ganas” de ser candidato

Roberto Lavagna sigue tejiendo en silencio. La propuesta de dirigentes del peronismo, del sindicalismo y del progresismo para tenerlo como el candidato presidencial de la unidad para enfrentar al macrismo y al kirchnerismo en las elecciones de octubre toma forma cada vez que trasciende alguna reunión que protagoniza el ex ministro.
El jueves fue el turno del gobernador santafesino, Miguel Lifschitz, quien lo visitó en su refugio, que elige cada verano en el bosque de Cariló. “Lo vi con muchas ganas y mucha energía para una posible candidatura. No está desesperado por presentarse y tampoco me lo aseguró, pero cree que para este momento de la Argentina él puede ser una figura que represente la unidad para una tercera vía que rompa con la polarización”, reveló ayer el mandatario santafesino a PERFIL sobre su encuentro con Lavagna.
Para Lifschitz, el plazo para definir el armado de este frente electoral con el ex ministro de Néstor Kirchner a la cabeza debería tener una idea concreta entre febrero y marzo, ya que “las maquinarias electorales del macrismo y del kirchnerismo ya están en marcha”.
Sobre un posible acercamiento con Alternativa Federal, que ya tiene lanzado como candidato a presidente al salteño Juan Manuel Urtubey y donde Sergio Massa también muestra sus intenciones, el gobernador santafesino contó que hablaron con Lavagna la idea de buscar “acuerdos”, aunque aclaró: “No alcanza solo con el Peronismo Federal, también tenemos que sumar al progresismo y a sectores del radicalismo que por lo bajo manifiestan su incomodidad con Cambiemos”.
En su almuerzo con Lifschitz, Lavagna descartó cualquier acercamiento con el kirchnerismo en una hipotética unidad del peronismo y se mostró muy preocupado por la situación económica actual. “Para él, en términos de deuda, estamos como en 2001 pero sin la posibilidad de ir a un default”, contó el mandatario de Santa Fe.

Operativo clamor. Lavagna no habla en público. Fiel a su estilo parco, evita cualquier referencia a una candidatura. En privado, prefiere hablar de un armado electoral más amplio antes de aventurar cualquier definición. Fue Eduardo Duhalde el primero en lanzar su nombre y cada vez que se lo preguntan el ex mandatario asegura que trabaja para Lavagna presidente. Parte del sindicalismo también ve en el ex ministro de Economía al candidato ideal para vencer a Macri y evitar a Cristina como la jefa del peronismo.
En noviembre pasado, hubo un almuerzo que organizó el gastronómico Luis Barrionuevo junto a Armando Cavalieri (Comercio), Gerardo Martínez (Uocra), José Luis Lingeri (Obras Sanitarias) y Andrés Rodríguez (UPCN), entre otros líderes gremiales. Los sindicalistas le plantearon su apoyo a una eventual candidatura. Un mes después, llegó el turno del sanjuanino Sergio Uñac. El gobernador, que coquetea con el kichnerismo pero también mantiene buena relación con otros sectores del peronismo, lo recibió en su casa y reveló que también lo vio dispuesto a ser el “candidato de la unidad”.