POLITICA

Levantaron el paro en la línea 60

Pedían reincorporación de cuatro empleados y denunciaban "flexibilización laboral".

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Los choferes de la línea 60 de colectivos levantaron hoy la huelga que realizaban desde el martes último en reclamo de la reincorporación de cuatro compañeros despedidos y para denunciar una "flexibilización laboral" contra otros cien conductores del medio de transporte.

El delegado Mario Andrés Molina dijo a la agencia DyN que la medida de fuerza fue suspendida a raíz de un "acuerdo informal" alcanzado anoche en la cabecera de la localidad bonaerense de Ingeniero Maschwitz, partido de Escobar, entre la Comisión Gremial Interna (CGI), ejecutivos de la empresa que opera la línea -MONSA- y funcionarios del Ministerio de Trabajo de la Nación.

Molina precisó que, desde las 8, se comenzó a brindar un "servicio mínimo" de colectivos en los 19 ramales con los que el 60 conecta el barrio porteño de Constitución con Escobar y Tigre, y traslada a unos 250 mil pasajeros por días.

El delegado estimó que la actividad "se normalizará por la noche" y anticipó que el ministro Carlos Tomada recibirá a la CGI y a los ejecutivos de la compañía a las 11.30 en la sede principal de su cartera, ubicada en la avenida Alem 650 de Capital Federal, con el fin de "oficializar el acuerdo".

Molina aseguró que Micro Omnibus Norte SA (MONSA) se comprometió a "reincorporar a los cuatro" trabajadores despedidos, aunque hasta ahora admitía que había cesanteado "sólo a dos" choferes. El gremialista sostuvo que la compañía "dará marcha atrás con el cambio de tares con el que se afectó a cien trabajadores con la flexibilización laboral" denunciada, y que "pagará los días caídos" por la huelga, contra lo que MONSA había dicho en medio del conflicto.

El cese de actividades había empezado a las 11.30 del martes, desde cuando fue reforzado con cortes en la calle colectora de la Panamericana, a la altura de la cabecera de Ingeniero Maschwitz. En ese lugar, los trabajadores y agentes de Gendarmería Nacional protagonizaron escenas de tensión por el frustrado intento de los choferes de subir a la autopista para bloquear el tránsito. La protesta, además, incluyó obstrucciones vehiculares en torno a Plaza Constitución, en Capital, donde hubo situaciones similares ante efectivos de la Policía Federal que procuraban minimizar los efectos de los cortes de tránsito.

El conflicto entre los conductores de la línea 60 de colectivos y MONSA se enmarcó en una serie de enfrentamientos entre la CGI y la conducción de la empresa, que está a cargo de la compañía desde que pasó a formar parte del Grupo DOTA. El primer conflicto se registró a principios de 2010, cuando los delegados denunciaron una incorrecta liquidación de haberes por el concepto de vacaciones.

MONSA se resistía a admitir la irregularidad, lo que derivó el huelgas, cortes de tránsito e incidentes entre choferes alineados con la CGI y presuntos nuevos conductores de la línea 60 con sintonía con la posición de la empresa, denunciados por los delegados como "una patota contratada por la compañía para amedrantar a los trabajadores".

Por su parte, MONSA achacó a la CGI la "generación de los conflictos con la intención de formar una cooperativa para quedarse con la empresa". Esos conflictos incluyeron numerosas reuniones en el Ministerio de Trabajo de la Nación, donde se requirió la presencia de Carlos Tomada en uno de los encuentros para desactivar una huelga de extensión similar a la que finalizó hoy.