Los despidos en distintos sectores y niveles del Estado llegaron hasta la familia de Carlos Liuzzi, mano derecha del exsecretario de Legal y Técnica Carlos Zannini.
El presidente Mauricio Macri le encargó a Pablo Clusellas, quien hoy se encuentra a cargo de esa secretaría, que desarticule al clan que ocupaba unos 30 cargos.
Unas 11 personas, de las 30 que había en total, fueron desvinculadas de sus cargos. En promedio, cobraban unos 50 mil pesos de sueldo, además de otros beneficios que obtenían según el cargo que desempeñaban, según informó el diario La Nación.
El primero en ser echado fue Carlo Marco Liuzzi, quien se desempeñaba como director de Enlace Internacional del Registros de Dominios de Internet. "Me echan por portación de apellido", exclamó, al conocer que debía dejar su cargo.
Al igual que sus familiares, fue nombrado en la planta permanente de la Secretaría de Legal y Técnica sin cumplir el requisito de ganar un concurso, como establece la Ley Nacional del Empleo Público, la N° 25.164.
Carlos, la mano derecha de Zannini, fue denunciado por frenar un allanamiento dispuesto por el juez Norberto Oyarbide a la financiera Propyme, ocurrido en diciembre de 2013. El exfuncionario está investigado por supuestos vínculos con una consultora informática proveedora de su área, Adconsa.
La secretaría de Legal y Técnica, que en el año 2008 contaba con 294 empleados, llegó a tener bajo la administración Zannini a 515 personas trabajando en ella.
