Martín Insaurralde aseguró que "no hubo negociación con el Frente Renovador en ningún momento”, y sostuvo que “habla” con “todos los candidatos".
Así, el precandidato a gobernador de la provincia de Buenos Aires por el Frente Para la Victoria quiso terminar la polémica por sus interminables coqueteos con el espacio de Sergio Massa y su pertenencia total al oficialismo.
En ese sentido, el intendente de Lomas de Zamora afirmó que las imágenes con Massa fueron parte de eventos sociales de los que participó su esposa Jésica Cirio y explicó que "no tengo problema en sacarme una foto con Massa, con Macri".
En diálogo con "Liberman en Línea" (FM Uno 103.1), el precandidato y dejó en claro que su apoyo al gobierno nacional quedó demostrado con sus actos: "Sé lo que hice, acompañé todas las leyes cuando estuve en Diputados”, sostuvo.
“Las descalificaciones están de más, discutir no sirve, debatamos ideas", planteó Insaurralde para frenar el aluvión de críticas que le llovieron desde el kirchnerismo cuando anunció que competirá por la gobernación.
"Yo estuve al lado del gobernador desde el primer día, estoy convencido que Daniel Scioli va a pasar las PASO en agosto", sentenció el jefe comunal y dejó en claro que competirá en las internas del Frente Para la Victoria. Así, rechazó el planteo de Patricio Mussi, quien pidió una reunión a puertas cerradas para reducir el número de candidatos oficialistas.
Por último, le pidió al competidor de Scioli (el ministro del Interior y Transporte, Florencio Randazzo) que baje el tono de las críticas en la campaña: "Florencio es un gran ministro, pero no contribuye a nada las críticas. Algo estamos haciendo mal. Tenemos que hacer una autocrítica", finalizó.
