El ex presidente de la Rural
no se calla nada en un reportaje imperdible. Cristina, la economía, la política y
las
protestas que vienen.
|
Revista Fortuna
"En su momento ganamos, pero la anulación de la resolución 125 después nos trajo inconvenientes", confiesa el ex presidente de la Sociedad Rural, Luciano Miguens, en el nuevo número de la revista Fortuna, a casi un año del conflicto que generó aquella iniciativa del Gobierno y con el campo azuzando un nuevo paro.
"Yo creo que hoy el Gobierno no va a atender un nuevo reclamo sobre retenciones por las necesidades de caja que tiene", intuye el ruralista mientras la Mesa de Enlace pide la anulación lisa y llana del pago de derechos de exportación por parte de los productores.
Esto no le gusta a los autoritarios
El ejercicio del periodismo profesional y crítico es un pilar fundamental de la democracia. Por eso molesta a quienes creen ser los dueños de la verdad.
Aunque ya no está al frente de la Rural ni participa en las reuniones con las otras entidades agrarias, Miguens sigue siendo un referente indiscutido para el sector. Luego de 13 años al frente de la institución ganadera más poderosa del país, dejó el cargo pero no el poder según dicen quienes lo conocen en la intimidad.
Acusado desde sectores afines al Gobierno de "golpista" durante el conflicto generado por la 125, el ruralista no se calla nada en el extenso reportaje que publica Fortuna. "Cuando veo las recientes medidas de la Presidenta me parece que no tienen nada que ver con la realidad, todo esto irrita al productor", dice.
Según Miguens, los Kirchner "tienen una visión equivocada sobre el campo", ya que "de golpe, vieron la suba de un producto, como lo es la soja, que tenía una rentabilidad importante para el sector y empezaron a creer en la renta extraordinaria y a hablar de que había que distribuirla".
Avanzada la entrevista, el líder rural hace incluso una autocrítica sobre el hecho de haber reclamado sólo por la soja, aunque reconoce: "Nunca pensamos que terminado el conflicto por la 125 no se iba a poder hablar de los otros temas".
Enseguida, Miguens aclara que después del conflicto pensó que "después de los festejos" por el voto no positivo de Cobos "creímos que era el momento para sentarnos a hablar de los productores chicos, pero se creó como un castigo al sector y el Gobierno mantuvo la confrontación".
(El reportaje completo, en el nuevo número de Fortuna)
