El camarista Eduardo Freiler sufrió un intento de robo de su caja fuerte, en su casa, a 500 metros de la Residencia Presidencial de Olivos, mientras permanece de vacaciones en Necochea. Los ladrones que huyeron sin poder alcanzar su objetivo se llevaron alhajas de oro, armas largas y dinero en efectivo.
Freiler es uno de los camaristas que junto con Eduardo Farah y Jorge Ballestero de la sala 1 de la Cámara Federal porteña deberá decidir si ratifica o modifica el procesamiento del vicepresidente Amado Boudou, en el caso Ciccone, cuando cese la feria judicial en febrero. No obstante, el fallo no tiene fecha definida.
El asalto ocurrió en la media noche del lunes, cuando la señora que estaba al cuidado de la casa entró luego de sacar la basura. Dos hombres la amenzaron, la hicieron ingresar a la vivienda de la calle Wineberg 2655, en Olivos, y la encerraron en un habitación, aunque la mujer resultó ilesa.
La casa del camarista tiene rejas y lonas verdes que impiden ver su interior. Ubicada a 500 metros de la residencia de Olivos, la vivienda del magistrado judicial está es una zona con vigilancia privada en garitas y de la policía.
Según consigna el diario La Nación, el entorno del juez considera que el robo no fue “al voleo”. El personal de la policía bonaerense a cargo de la investigación y el fiscal Alejandro Guevara, de Vicente López, coinciden de que no hay duda de que entraron a la casa con el conocimiento de que había algo de valor, aunque no mencionaron que sabían que era la vivienda de un juez.
Los investigadores creen, además, que participó un tercer involucrado que actuó como “campana” en un auto cerca de la casa para avisar sobre posibles dificultades que entorpecieran la maniobra delictiva.
