POLITICA

Sección El Espía

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Un nuevo clásico en la agenda de la legislatura porteña. En los pasillos de la Legislatura porteña aseguran que el asunto ya se convirtió en un clásico. No tiene nada que ver con política, pero ya se instaló con la misma firmeza en la agenda que las labores parlamentarias. Y a la hora de salir a la cancha, aseguran los protagonistas, todo se dirime a cara de perro. El duelo en cuestión es el cotejo que tiene como protagonistas a los diputados porteños del bloque macrista, que cada miércoles por la noche, desde que comenzó el año, se sacan la corbata y se ponen los botines en Puerto Madero. Juegan contra segundas líneas del bloque oficialista, y por ahora están invictos. Aunque el equipo de asesores que por ahora lleva las de perder ha amenazado con pedir la incorporación de un árbitro neutral, porque parece que el team de legisladores suele tentarse con escribir su propio reglamento y cobra lo que le viene bien. En el último partido disputado, de hecho, cuando parecía que la primera derrota era un hecho, dos oportunos y polémicos penales sobre el final del partido evitaron la caída y el cotejo terminó empatado 3 a 3. Entre quienes integran el seleccionado de legisladores macristas están Daniel Presti –quien tiene la difícil tarea de defender el arco–, Martín Ocampo –que tiene buen dominio de la pelota, pero suele hablar durante todo el partido y fingir infracciones que nadie ve–, y el habilidoso Fernando De Andreis. También se destacan Rogelio Frigerio –de juego ordenado, aunque algo quejoso– y Cristian Ritondo, quien hace valer su rol como jefe (incluso de algunos de sus rivales). Enzo Pagani es un defensor firme, aunque en caso de necesidad no duda en aplicar la fuerza con alguna falta. Daniel Lipovetzky, Francisco Quintana, Jorge Garayalde y Alejandro García completan la formación. Los partidos se dan en un clima amistoso, aunque no faltan los roces que hacen que algunos jugadores se olviden de los protocolos. Con la estadística de su lado, los diputados amenazaron a sus contrincantes con organizarles un encuentro contra un equipo integrado únicamente por las diputadas que forman parte del bloque macrista. Cargadas aparte, cada fecha suele terminar con un amistoso tercer tiempo en algún restaurante de la zona.

El sueño del club propio.
Otro asunto que también mezcla fútbol con política es el final del sueño de Facundo Moyano de catapultar su carrera política a través de la conducción de un club. El joven diputado nacional del Frente para la Victoria había arrancado el año con mucha actividad desde su rol de presidente del club Alvarado de Mar del Plata. Pero, por disputas internas de la entidad de la que es hincha desde chico, Moyano decidió presentar su renuncia a la presidencia sobre el cierre de la semana, tal como había hecho pocos días antes el técnico del equipo que juega en el Torneo Argentino B. Pese a su promocionado acercamiento de los últimos días al intendente de Tigre, Sergio Massa, el líder de la Juventud Sindical Peronista no logró que su nuevo referente le revelara a tiempo la fórmula para catapultar su proyección política como él mismo hizo en el club Tigre.

Almuerzo para ellas.
“El rol de la mujer de hoy en un mundo competitivo.” El título del encuentro podría hacer pensar en algún claustro universitario y en un ambiente demasiado formal. Pero el lugar de la cita era el Palacio Duhau Park Hyatt, y tanto la convocatoria como el menú preparado especialmente por el chef Máximo López May garantizaban que el encuentro sería un almuerzo más que entretenido para celebrar de un modo distinto el Día de la Mujer. Las anfitrionas fueron Claudia Stad y Florencia Boskis Stad, quienes reunieron en el salón Piano Nobili a emprendedoras como Viviana Zocco de Hadad, Canela von Buch, María Taquini de Blaquier, Rosella Della Giovampaola, Cristina Khallouf, Milagros Brito, Mónica Parisier, Ani Mestre y Myriam y Mariana Bagó. “La mujer moderna está muy comprometida con la sociedad”, señaló Stad. Coincidió con ella Esmeralda Mitre, quien destacó la importancia de que las mujeres se dejen llevar por su vocación: “Hay que amar lo que uno hace”. Por su parte, Catherine Roemmers señaló que en su país, Finlandia, las mujeres pueden elegir su destino sin barreras, y confesó que ella decidió mudarse a trabajar a Londres porque el clima finés era demasiado frío. Como ejemplo de los logros a los que puede aspirar cualquier mujer que se lo proponga, las comensales coincidían en señalar sin dudas a Máxima Zorreguieta, futura reina de Holanda.

Cambio que no cambia. Luego de los fuertes cruces que mantuvo hace algunos días con el titular de la bancada del Frente para la Victoria en el Senado, Miguel Angel Pichetto, Amado Boudou aseguró entre sus hombres de confianza que muchas cosas iban a cambiar de ahora en más en la conducción de ese cuerpo. Lo cierto es que por el momento el hombre no ha encontrado mucho eco a sus ideas entre otros kirchneristas,  y lo único que se modificará en la Cámara alta, por ahora, por decisión suya tiene que ver con cuestiones arquitectónicas y no con la política, ya que Boudou dispuso la instalación de nuevos ascensores.

Fútbol y azar.
Podría decirse que las apuestas y el fútbol fueron los dos motivos por los que Daniel Amoroso viajó en los últimos días a España. Es que al legislador porteño alineado ahora con Graciela Ocaña se lo vio por Madrid, aunque no en calidad de diputado, sino como representante de los trabajadores de juegos de azar: el hombre firmó, como representante de la Unión Network International, un convenio con la empresa española Codere. Y ya que se encontraba allí, Amoroso aprovechó además para ver un poco de fútbol, aunque en este caso no estuvo en la platea de algún partido del Barcelona o el Real Madrid –cotejos obligados de aquellos argentinos que visitan la península ibérica–, sino con uno del Xerez, un equipo que milita en la segunda división del fútbol de ese país. No es que el legislador sea un romántico seguidor de los equipos chicos, sino que el enganche de ese club es ni más ni menos que su hijo Franco, quien se sumó al plantel a comienzos de 2013, luego de un paso por la liga de fútbol mexicana que, aseguran, fue bueno.

Elección mediática. Francisco de Narváez es el primero en lanzar la campaña electoral. Esta semana, al eslogan “Ella o vos”, que se repite en diferentes cartelerías de la ruta, comenzará a sumarle spots publicitarios en radio y televisión. Pero la campaña 2013 del diputado opositor tendrá una particularidad, ya que se dio la orden de pautar en todos los medios menos en Radio 10, Telefe y Canal 9. En el resto de los medios, se escucharán voces desconocidas de ciudadanos que te invitarán a responder: “Ella o vos”.

No sos único. Aunque el jefe de Gobierno, Mauricio Macri, buscaba fotografiarse solamente junto a Roberto Lavagna, el líder del PRO tuvo que conformarse con una foto grupal. Sucede que el ex ministro de Economía no quiere ser candidato de esa corriente política, como muchos se apuraron a augurar apenas distribuidas las imágenes, sino que apuesta a un frente más amplio, en el que incluso piensa en nombres como Gerónimo “Momo” Venegas. Con la última encuesta de Rouvier, que lo da primero en los sondeos, ahora Lavagna se dedicará a convencer a Gabriela Michetti para que lo acompañe en la candidatura de 2013 por la Ciudad de Buenos Aires. ¿Otra vez sopa?

Almuerzo y arte.
Entretenido almuerzo organizó en su amplia propiedad la galerista Cecilia Caballero para celebrar el éxito de Intemperie, la muestra conjunta de los artistas Diego Atucha y Julián León Camargo en su local de la avenida Alvear. La que más contenta estaba con la marcha de la exposición, que estará abierta hasta el 19 de marzo, era su curadora, Patricia Rizzo, quien conversaba con Laurent Muhlseosen, consejero literario del Teatro Nacional de Francia, y con Patricia Allende de Ordóñez. Entre quienes disfrutaron del sushi y del luminoso departamento de Caballero, se vio también a los artistas Diego Bianchi, Isabel de Laborde y Manuel Amestoy.

Según como se mire... Las diferencias entre kirchneristas y sciolistas por la situación económica de la provincia de Buenos Aires se hicieron notar el miércoles a la noche en Aldo’s, un restaurante de San Telmo que es elegido por muchos jóvenes asesores, funcionarios y ministros. Allí, la división quedó al descubierto al haber dirigentes ubicados en respectivas mesas que ni siquiera se levantaron para saludarse. En una de ellas comían el vicepresidente, Amado Boudou; el secretario de Seguridad, Sergio Berni; el vicegobernador Gabriel Mariotto; el secretario administrativo del Senado nacional, Juan Zabaleta, y el secretario de Relaciones Intitucionales del Senado bonaerense, Marcelo “Patón” Torres. Como ocurre en estos casos, según la pertenencia política o la intención del ocasional espectador –o comensal presente–, fue el ala kirchnerista la que no invitó a compartir la mesa al sciolismo, encarnado en Aldo’s por el locuaz jefe de Gabinete bonaerense, Alberto Pérez, y el subsecretario de Relaciones con la Comunidad, Carlos Gianella, o fueron éstos quienes prefirieron no sumarse o invitar a aquellos aunque sea a una sobremesa.

Firme convicción. La ansiedad que le está generando este complicado año electoral está repercutiendo en el estado de ánimo de Sergio Massa. Al observar el aumento considerable de su peso, algunos de sus colegas suponían, finalmente, que el joven político estaba cumpliendo sus infinitas promesas y había dejado el hábito de fumar. Pero no, los participantes de la Fiesta de la Vendimia Solidaria, organizada por Daniel Vila en Mendoza, pueden dar fe de ello. Cada vez que las cámaras no lo enfocaban, se alejaba y encendía un cigarrillo. Uno de los asistentes, empresario del rubro vitivinícola, ubicado en una mesa contigua a la principal, preguntó: ¿por qué Sergio parece tan ansioso si las encuestas le dan muy bien? Sin saberlo, en la misma mesa estaba sentado uno de los principales asesores de Massa, que repitió declaraciones de su jefe: “Sergio no cree en las encuestas”. Y agregó un dato, una de las últimas que están circulando es de una consultora que en 2011 daba a Francisco de Narváez ganando las elecciones para gobernador sobre Scioli, quien se impuso por más de 40 puntos.

El gran imitador. Nito Artaza parece extrañar los aplausos y risas que generaba cuando se subía a los escenarios. Por ello, el radical optó por trasladar el humor político al Congreso. Es en las reuniones de las comisiones que integra o en los encuentros del bloque que Artaza comienza a realizar las imitaciones de quienes ahora son sus pares. Es así que el senador aprovecha la llegada tarde de algún colega para imitarlo y hacer reír al resto. Aunque Artaza evaluó hacer teatro en la temporada 2014, ahora la política le volvería a poner un freno para llegar a la elección 2015 con una posible candidatura a gobernador por Corrientes.