Telefónicas: qué hay detrás de la portabilidad numérica que aprobó el Gobierno

El miércoles de la próxima semana se discutirá en la Cámara Alta el proyecto de ley que establece, tras una mora de diez años, la portabilidad numérica para el servicio de telefonía móvil y fijo.

En lo que se preveía fuera una antesala, la Comisión de Medios y Libertad de Expresión y Derechos y Garantías recibió ayer al secretario de Comunicaciones, Lisandro Salas, para exponer la resolución que aprobó el Ejecutivo y que sólo abarca a los titulares de teléfonos celulares pero deja de lado la telefonía fija. Pero éste no es el único detalle que diferencia a ambos proyectos.

"Estamos trabajando desde hace dos meses con diversos proyectos para implementar la portabilidad y se lo convocó (a Salas) a que viniera a exponer su punto de vista", contó la senadora y presidenta de la comisión de  Medios y Libertad de Expresión, María Eugenia Estenssoro a Perfil.com.

La idea, en principio, era cerrar filas en un proyecto consensuado con el oficialismo. "Horas antes de la reunión (el martes 17, a las 22hs) se dio a conocer una resolución para implementar la portabilidad, cosa que no tiene ninguna justificación", porque ese proyecto - consideró Estenssoro - excluye a las líneas de teléfonos fijas: "Salvo que se quiera beneficiar a las dos empresas de telefonía fija", explicó. En su efímera presentación ante los senadores, Salas se limitó a decir "ésta es la reglamentación, le pido que la lean".

"En la medida que los usuarios estén de rehenes de su operador también las tarifas seguirán altas. Las tarifas de celular en Argentina están entre las más altas del mundo", sostuvo la senadora de la Coalición Cívica.

Entre los puntos en disidencia con el Ejecutivo nacional aparece, también, la posibilidad de cambiarse de compañía sin tener que pagar. De acuerdo a Estenssoro, "el costo lo tienen que absorver las empresas porque es una inversión", que no aparece en la resolución aprobada por el oficialismo.  De hecho, hoy se supo que las telefónicas podrían cobrar cinco pesos para mantener el número.

"Los costos del equipamiento necesario y el funcionamiento del sistema, estimados en alrededor de 40 millones de dólares, serán absorbidos por las empresas licenciatarias de telefonía móvil", anticipó ayer, por su lado, el secretario de Comunicaciones, hombre de De Vido.