POLITICA
CABLEGATE: PERIODISTAS CAUTIVOS

Un ex director de Télam dijo tener relaciones con la Embajada de EE.UU

En medio de la polémica por un grupo de prensa cautivo de la oficina diplomática, Martín Granovsky admitió en 6.7.8que la frecuenta desde 1984. Video.

Martín Granovsky el día de su asunción como titular de la agencia Télam, durante la presidenta de Néstor Kirchner.
| DyN

Martín Granovsky, ex titular de la agencia de noticias Télam, sabe que es probable que su nombre figure en uno de los 250 mil documentos liberados por WikiLeaks. Es por eso que ayer, mientras en el programa ultraoficialista 6.7.8 se debatía sobre los "periodistas cautivos" de la diplomacia norteamericana en Argentina, el ex funcionario reconoció que mantiene fluídas relaciones con la embajada desde 1984, pero se desligó de ese grupo de "alcahuetes", como los nombró. 

"Con el tema de los periodistas cautivos, digo, hay una cosa interesante. En realidad yo voy a decir algo… voy a confesar que no soy un periodista cautivo, pero que fui por primera vez a la embajada de los Estado Unidos hace, es un viejazo esto...  26 años", reveló Granovsky, quien dijo llegó allí por consejo de su entonces jefe Jacobo Timerman, padre del actual Canciller Héctor Timerman.

Imitando la voz del creador de Primera Plana y Confirmado, el periodista de Página/12 recordó que en septiembre de 1984 Timerman le dijo: “Mirá, hay dos temas que van a ser muy interesantes en este país: derechos humanos y política exterior. Prestales atención”.

"Una de las cosas que me recomendó es: hacer relaciones con la embajada de los Estados Unidos. Desde ese momento yo tengo relaciones profesionales en términos de información", admitió y se escindió del grupo de periodistas cautivos. "¿Uno que hace, si es periodista? Busca información", se preguntó y respondió.

Periodista, no alcahuete. Granovsky, que hace un año dejó Télam y fue reemplazado por Martín García, sostuvo que en muchos de los cables hay "intercambios de análisis" entre periodistas y una fuente diplomática y que eso hace él cuando visita la Embajada.

"Nadie te pide que seas alcahuete. Enrique Zuleta dijo que lo que hay en los cables es la constancia de que hay grupos de alcahuetes, que no sólo van a contar cosas, sino que van a decir lo que suponen que el otro quiere escuchar. Y a veces lo que el otro quiere escuchar, si es un diplomático serio, incluso aunque no esté de acuerdo ideológicamente, como suele pasar, lo que quiera escuchar, son datos reales, no revelaciones", afirmó y añadió que en ningún caso "estamos hablando de espionaje". Vea el video.