PROTAGONISTAS

Nik despide a Ferré

"Su mundo era contenido y feliz", dice el creador de Gaturro sobre el padre de Hijitus.

"Hijitus era el héroe nacional", dice el creador de Gaturro.
| Cedoc

A Manuel García Ferré lo conocí mucho porque él fue quien me dio una de las primeras oportunidades para publicar mis dibujos. Tenía sus oficinas en Corrientes y Uruguay y yo iba a la escuela de Carlos Garaycochea y me cruzaba para mostrarle mis dibujos.

Yo tenía 16 años y gracias a él publiqué mis primeros dibujos profesionalmente. Me tenía en recepción esperando, a veces una hora. Pero un día pasó por ahí, me vio, me presenté y le mostré lo que llevaba y me recibió.

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Vio mis dibujos y me dijo: “Bueno, cuando tengas traé”. El los solía mirar, los corregía, me hacía sugerencias, me dedicaba tiempo. Yo estaba impresionado con que un tipo de su talla me prestara atención. Por más que yo era chico, notó que había un germen que podía crecer en mí.

Ferré tenía gran pasta de líder, así fue que armó equipos para hacer sus dibujos animados, sus revistas…Tenía gran liderazgo, pero no desde una voz de mando. Al contrario, su voz era suave y pausada; se imponía desde el respeto, sabía mucho y le gustaba el trabajo en grupo. Y le dio mucho trabajo a mucha gente, y muchas oportunidades; también nos enseñó.

Mi personaje favorito era Hijitus porque me parece que es uno de los conceptos más logrados. Y claro, también el más popular, Larguirucho. Pero Hijitus era el héroe nacional, un chico que se convertía a través del sombrero, tenía ética y estaba rodeado de personajes secundarios que lo hacían más rico. Además, fueron los primeros dibujitos nacionales que vimos en la tele.

Creo que Ferré aportó mucho: fue un pionero en la animación a nivel local. Veníamos acostumbrados a ver Tom y Jerry, y García Ferré era la opción latinoamericana. Fue un pionero en entender el mercado infantil en Argentina a través de sus películas, sus cortos y sus dibujos, incluso, del merchandising. Y hay una mirada tierna en sus dibujos, nunca en sus creaciones se va a encontrar algo grotesco. Era un mundo contenido y feliz por eso se lo llamaba el Walt Disney argentino. Algo que para mí es equívoco porque él le puso propio sello.

Lo vi hace poco y creo que para él era un placer ver que quienes lo seguimos, hayamos podido hacer una carrera.

(*) Humorista gráfico.