PROTAGONISTAS
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Pergolini y Pettinato en el centro de la polémica por la música y la droga

El contrapunto, que comenzó al aire después del caso de Costa Salguero, se amplió. Famosos opinan y cuentan cómo viven o vivieron las fiestas electrónicas desde adentro.

Opuestos. “No es la música la que te hace consumir”, dice Pergolini. Y Pettinato responde: “La electrónica viene con droga”.
| Cedoc Perfil
Signada por la tragedia, las acusaciones cruzadas y la polémica. Así fue la última semana luego de la trágica fiesta electrónica Time Warp, que terminó con cinco jóvenes fallecidos y varios más internados en grave estado. Desde el exceso de público hasta la edad de los chicos o la variedad de pastillas que se consumieron, se habló de todo y muchos famosos y personajes del mundo artístico y de la cultura se hicieron eco de lo ocurrido y compartieron su opinión. Quienes ahondaron más en el tema y marcaron posturas distintas con igual contundencia fueron dos reconocidas figuras del rock, Mario Pergolini y Roberto Pettinato.
En un editorial a la que llamó “El dealer no es amigo”, y consciente de que su programa en radio Vorterix es uno de los más escuchados por los jóvenes, Mario Pergolini fue contundente con sus dichos. “No es la música, ¡eh!”, aseguró durante el monólogo, que duró más de siete minutos. “No es la fiesta electrónica. No era nuestro rock en los 80 lo que nos hacía consumir cocaína. No fue el reggae el que nos decía que teníamos que fumar porro”, agregó en un discurso que leyó.
Unos días después, Roberto Pettinato también aprovechó su popular programa en la Rock&Pop para hablar sobre la tragedia y focalizar en las precauciones a tomar. Su postura fue categóricamente opuesta a la de su colega. “Estos chicos se van a drogar igual, no es apología, es hablar desde la experiencia”, dijo. Además, en contraposición con la postura de Pergolini, afirmó: “la música electrónica viene con pastillas. ¿El cine viene con pochoclos? Bueno, la música electrónica viene con eso”. En comunicación con PERFIL, Pettinato explicó y amplió sus dichos: “La expresión fue parte de la velocidad tóxica de estos tiempos. A nadie le importa resolver sino debatir. Desde los años locos de Ibiza los eventos electrónicos fueron así. No quise decir que la música específicamente viene con una pastilla en el CD. En el festival de Woodstock de 1969 ya los organizadores tomaban el micrófono y le decían a las 500 mil personas que no tomaran tal ácido marrón porque era veneno. Acá aún no pueden poner un cartel de alerta a la entrada de una fiesta. Es probable que a partir de la muerte de gente, el resto pueda aprender algo. Horrible que sea así pero parece ser el modo en que la humanidad toma conciencia de algo”, dijo. Preocupado, agregó: “No se parará con el consumo. Pero sí podemos mejorar con prevención. Nuestro país se especializa en el hablemos sin saber y en opiniones de gente que de sólo verlos dan ganas de narcotizarte aún más. Una lástima”. En el medio de ambas posturas se cuelan los matices.
El humorista Nik, otra voz de la cultura que alguna vez asistió a alguna fiesta electrónica dijo: “En la sociedad hay un prejuicio muy grande que lleva a asociar determinado tipo de música con distintos tipos de sustancia. La realidad es que en este tipo de fiestas lo que sucede es que se exacerba el festejo, el estar bien en un momento determinado. Yo he visto mucho hacinamiento, chicos tirados en el piso, descontrol. Pero hay que perseguir a los dealers, no a los chicos. A los chicos hay que concientizarlos a través de campañas fuertes”, exigió el humorista.
Florencia Peña, otra figura que habló del tema, contó cómo actuó luego de lo ocurrido. “Yo como mamá, cuando sucedió esto, pensé: qué puedo hacer. Negarlo, no, decirle no lo hagas, no. Así que decidí sentarme con mi hijo y decirle mirá pasa esto, si vos querés experimentar, hacelo controladamente. Una como madre no puede estar viendo qué está haciendo su hijo todo el tiempo”, expresó Peña. La modelo y conductora Ursula Vargues sostuvo que hace unos años solía ir a fiestas electrónicas y no era lo mismo que ahora. “Droga siempre hubo, como lo hay en todos lados. Es confuso ligar a la música. Pero en ese momento se iba más a escuchar al DJ, a escuchar la música”, se lamentó en comunicación con PERFIL. Gastón Soffritti, actor que tiene la misma edad que algunos de los chicos fallecidos y que el año pasado asistió a la Creamfields, no salía de su asombro. “Voy como invitado, y al vip. Desde el lado en el que está ubicado no se ve mucho lo que pasa abajo. Y aunque a mí nunca me ofrecieron, sé que se consumen drogas. La solución a esto no es fácil. Creo que hay que educar sobre el tema. Si no, tenés a pibes que terminan siendo conejillos de Indias y mueren por culpa de gente que lucra y no le importa la vida de los demás”.