Que no tiene canal, que El Trece no lo quiere y que por eso ya sacó su marquesina de sus estudios de Constitución –aunque dejó la de Mariano Iúdica, un producto nato de Ideas del Sur–, que quiere comprar Canal 9, que negoció con Telefe para estar en su pantalla aunque esta semana un comunicado de la emisora dio por tierra esa versión, o que le vendería el 70% de Ideas del Sur al empresario kirchnerista Cristóbal López...
También se habló de que la situación personal de uno de sus mejores amigos lo llevó a Marcelo Tinelli a replantearse, otra vez con una mirada espiritual, la vida misma y de si no era éste un momento para mirar el horizonte profesional de otra manera. Pero quienes lo conocen de hace años, opinan que en su interior, el conductor es una máquina de trabajar y la competencia le sigue generando esa adrenalina que sólo quienes conocen el poder disfrutan a pesar de los riesgos que conlleva.
Con todo, el silencio de Tinelli sobre su futuro 2013 en la pantalla provoca no sólo un recalentamiento en las oficinas de producción de los programas que viven durante el año de los escándalos y situaciones que genera el conductor en su programa sino que ha hecho correr tinta y segundos televisivos y radiales con los escenarios arriba mencionados y con “primicias” sobre el destino final del empresario que finalmente terminaron engrosando el listado de especulaciones que su ausencia generó incluso hasta el cierre de esta edición (ver recuadro).
Remanso. Pero pese a que en el plano laboral son tiempos de turbulencia o indefiniciones –al menos de manera pública–, en el universo estrictamente personal Tinelli pasa por uno de sus mejores momentos. Luego de un verano solitario, parece haber dado una segunda oportunidad a su corazón y en febrero se “reencontró” con Guillermina Valdés, de quien se había separado en noviembre tras cuatro meses de relación. Y esta vez todo parece darse con más tranquilidad y armonía.
“Cuando nos separamos sentí que había valido la pena. Yo me quedé sola, no fue un impasse. Esto volvió ahora porque así es la vida. Pero no me arrepentí en ningún momento. Crecí mucho y atravesé muchas cosas manteniéndome en un lugar que tiene que ver conmigo. Agradezco todo lo doloroso que viví, lo lamento por mis hijos, pero también crecieron. (…) Marcelo como hombre me hace muy bien”, dijo ella en vísperas del lanzamiento de su marca de calzado a la que Tinelli asistió y donde él se mostró muy cariñoso con ella.
Fue en ese ámbito que la modelo aprovechó para aclarar la polémica generada por una foto que mostró a Tinelli de la mano de Helena, una de las hijas de Valdés con Sebastián Ortega. La misma fue tomada durante la escapada a su estancia de Esquel que realizó la pareja junto a sus respectivos hijos. Mucho se habló de esa imagen ya que algunos la definían como una provocación de Marcelo hacia el creador de Graduados. Como si parte de su lugar en la pareja fuera defender a Tinelli de comentarios sensibles hacia su persona, Guillermina explicó: “Mi hija le dio la mano a Marcelo porque lo quiere mucho. Estuve escuchando que él le dio la mano a propósito y eso no fue así. Mi hija lo adora”.
Fútbol premium. En una semana –el 1º de abril–, el conductor cumplirá 53 años y según trascendió ayer el festejo será en Europa. El único destino confirmado es, por ahora, París donde asistirá a partidos de la Champions League. De la partida, hasta el momento, son su primo Luciano Tirri –uno de los pocos que de su entorno lo hacen reír todo el tiempo con su histrionismo–, y su inseparable amigo Federico Ribero.
Con este último compartió una estadía inesperada en un hotel cinco estrellas de Recoleta donde el empresario tuvo que alojarse por varios días debido a que en su piso de Le Parc (Figueroa Alcorta) no se habían terminado algunas refacciones que comenzaron mientras él estaba de vacaciones en Punta del Este. Como las mismas se prolongaron más de lo previsto, el conductor se mudó luego a un departamente que le prestaron en el Chateau Libertador y allí seguirá por un tiempo.
