PROTAGONISTAS

Una despedida por partida doble

default
default | Cedoc
El productor televisivo y teatral murió a los 88 años tras una neumonía que terminó con su débil salud acechada por un largo padecimiento de mal de Alzheimer. Apodado el zar de la televisión, su importancia fue tal que tuvo una despedida doble.
Primero en el Teatro Nacional, que es de su propiedad, ubicado en la mítica calle Corrientes, a puertas abiertas como él mismo lo pidió. De modo tal que, además de amigos y familiares, el público que siguió durante años sus productos pudiera decirle adiós. Fueron muchas las figuras que lo fueron a despedir: Gerardo Romano –uno de los primeros en llegar–, Carlos Rottemberg, Gustavo Yankelevich, Fátima Florez, Natalia Oreiro, Antonio Gasalla, Daniel Scioli, Chiche Gelblung y Valeria Lynch. Todos coincidieron en recordarlo con afecto, como una buena persona, y un hombre fuera de serie. Luego, alrededor de las 23 el teatro cerró sus puertas para el traslado de los restos a la casa velatoria O’Higgins, para continuar, ayer, una despedida más íntima.
Luego del mediodía, su numerosa familia  y amigos de todos los Romay acompañaron sus restos al Cementerio Israelita de La Tablada. “Le agradezco a la gente que acompañó a mi papá en todo lo que hizo, él deja un legado, no sólo para mí sino a mucha gente que trabajó con él, su amor, su coraje y su deseo de crear continuamente”, dijo emocionado Omar, uno de los hijos que continuó el legado paterno como productor de espectáculos y de televisión.