“Mas que un hombre de Dios, Bernardo Stamateas es un hombre del diablo”, define así
Lillian Glass a quien considera su plagiador. En Estados Unidos, ella es una reconocida autora de
libros de autoayuda y experta en Comunicación y Lenguaje. El pasado 5 de diciembre, recibió en su
oficina de Beverly Hills, California, Gente tóxica, el best seller de autoayuda del pastor
evangélico, psicólogo y teólogo Bernardo Stamateas, publicado en mayo de 2008. El título le llamó
la atención ya que, en 1995, ella había publicado su libro Toxic people (en Argentina se editó en
1997 como Relaciones tóxicas).
Al leerlo, notó el asombroso parecido que había entre ambos: “Prácticamente todos los
conceptos que yo presento en mi libro, Toxic people, están presentes en el suyo. Stamateas
definitivamente ha violado los derechos de autor. Además, creó una confusión en el mercado con el
término ‘toxic people’, que tengo registrado y uso en mis prácticas profesionales desde
hace casi veinte años”. Vale aclarar que el libro de Glass no se encuentra en la bibliografía
consultada de Gente tóxica, de Stamateas. En ambos libros se tipifican personalidades conflictivas
–las llamadas “tóxicas”– y se recomiendan diversas técnicas para poder
relacionarse con estas personas. Si bien el autor argentino presenta 13 tipos de esta “gente
tóxica” y la norteamericana treinta, las similitudes entre ellas saltan a la vista.
“Stamateas menciona todas mi calificaciones de tipos de gente tóxica, cómo tratar con
chismosos, manipuladores, controladores, jefes tóxicos. Lo que hace, en algunos casos, es combinar
algunas tipologías mías en una sola suya”, explica Glass.