Barreda está preso desde que mató a su mujer, hijas y suegra. Un acting feroz que, sin embargo, no
lo eximió de la cárcel. El filósofo Louis Althusser estranguló a su mujer en la década del '80 y no
fue condenado. Se lo consideró inimputable de esa acción ( con sus dos manitas hizo callar para
siempre a Helene, su compañera en la militancia y en la vida) que el tribunal juzgó producto de sus
desequilibrios mentales.
Althusser cumplió en cierto sentido las fantasías de miles de señores que suelen decir
"callate porque te ahorco" o "decís una palabra más y te estrangulo". Las amenazas no son más que
metáforas del deseo de hacer callar. (Las mujeres-cuando tienen el don- son capaces de matar con la
palabra).A veces la fantasía se convierte en acto loco. Y se produce un salto al abismo.
Obviamente Barreda- a quien las mujeres que lo atormentaban llamaban burlonas "Conchita",
entre otros sobrenombres descalificatorios- también fue presa de un ostensible brote psicótico.
Horroroso. Una verdadera tragedia griega. (Mató a las Erinias que zumbaban a su alrededor
enloqueciéndolo). Pero nadie lo "interpretó" en aquel entonces. Fue directo a cadena perpetua.
Ahora, en el 2008, lejos de aquella locura sangrienta, pide un régimen carcelario más
abierto. Pero decidieron no otorgárselo.
(*) Periodista