SOCIEDAD

Choque de trenes de Ferrobaires: habrían pasado mal las coordenadas

Los investigadores creen que los maquinistas de uno de los coches habrían recibido mal los datos de la ubicación de la otra unidad. Galería de fotos.

Los trenes de Ferrobaires luego del trágico accidente de San Miguel. Luego las fallas y cancelaciones siguieron.
| Cedoc

El choque de trenes de Ferrobaires que ocurrió en las primeras horas de hoy, y que dejó al menos 70 heridos, se habría producido porque los maquinistas de uno de los coches habrían recibido mal las coordenadas del lugar donde el otro estaba detenido.

Así lo informó el jefe distrital de la Policía Bonaerense, Jorge Lespade, quien afirmó que una de las posibilidades que se baraja es que los conductores de la máquina, que esta madrugada embistió a tren de pasajeros al que iba a auxiliar en Monasterio, hayan recibido la altura de la ruta donde se encontraba la formación y no la medición de las vías, con lo cual no pudieron planear bien el momento del frenado.

Se trata, por caso, de una de las presunciones que los investigadores trataban hoy de confirmar, y supone que los conductores del tren de relevo hayan recibido por error la información de que el tren estaba detenido en el kilómetro 143, medición que corresponde a la ruta y no a la vía.

El choque se produjo alrededor de la 1.30 en el kilómetro 138 de la línea Roca, entre las estaciones de Lezama y Adela, a la altura del kilómetro 143 de la autovía 2, en la Provincia de Buenos Aires. El accidente se produjo cuando un tren fue a rescatar a otro que venía de Mar del Plata hacia Constitución y que había sufrido un desperfecto.

Lespade informó que todo comenzó a las 23.20 del domingo, cuando el convoy acababa de superar la localidad de Monasterio y se declaró fuego en la locomotora. El principio de incendio fue sofocado por los bomberos locales pero el tren quedó detenido y se requirió el envío de una máquina de relevo desde la cabecera porteña de Plaza Constitución, confirmaron fuentes ferroviarias de las estaciones Lezama y Castelli.

Esa locomotora auxiliar, la 335, fue la que impactó contra la incendiada, la 336, provocando daños en la estructura de varios vagones e incluso desmontando un par de ellos de las vías, lo que provocó heridas en decenas de pasajeros.