Pablo Torres Lacal (48), el conductor de la lancha Shark II –quien según los testigos, fue la que embistió de frente a la lancha en que venía la familia de Storani– quedó imputado el viernes por homicidio culposo agravado. Según informó ayer a PERFIL la Fiscalía que lleva el caso –Tigre Centro-Rincón de Milberg, a cargo de Mariano Magaz–, el viernes se le realizaron extracciones para un control toxicológico y de alcoholemia, y mañana estarían los primeros resultados que ayuden a determinar lo ocurrido en el momento de choque. Al cierre de esta edición, Torres Lacal continuaba internado de gravedad en el Hospital Italiano, con un coágulo en la cabeza, según informaron a Télam fuentes judiciales. Desde el Hospital, se negaron a dar información sobre su estado. El jefe de la delegación San Isidro de Prefectura, Aníbal Moya, confirmó que la nave Shark II fue encontrada en tierra, a unos 50 metros del lugar del choque, en las cercanías del Club Náutico San Fernando. Allí viajaban, además del timonel, David Di Rico y Francisco Javier Goti, quien falleció en el Hospital de San Fernando. En sus redes sociales, Torres Lacal dice trabajar como decorador, importando artesanías de Oriente. Hace surf, yoga, y por su trabajo viaja a destinos exóticos como Sri Lanka, Japón e India.
