SOCIEDAD
Ocho dias de despilfarro en la florida

Las increíbles vacaciones del ladrón que se fue a Miami

Alan Dzikoski fue detenido en el aeropuerto de Ezeiza. Viajó a Estados Unidos con un amigo, se alojó en un hotel de lujo, alquiló un auto descapotable y practicó tiro.

20170407_1192_sociedad_demian8786
Recuerdos. Demián (izq.) y Alan (der.) en los estudios Universal y en el lobby del hotel de Miami. | Cedoc Perfil

Se hospedó en un hotel de lujo. Recorrió los parques temáticos de Orlando y fue a un polígono de tiro. Después tomó sol en las playas de Miami. Tiene 23 años y, según los registros, no cuenta con un trabajo estable. Pero el relax y la buena vida se truncaron el martes, cuando fue detenido en el aeropuerto de Ezeiza acusado de integrar la denominada “Banda del Fal”, una organización que mató en Florencio Varela a un empresario para robarle seis millones de pesos, y le atribuyen robos a bancos y secuestros extorsivos.

“Contando los días”, le escribió Alan a su amigo Demián en su cuenta de Instagram. Juntos habían programado pasar ocho días en la costa de la Florida. No se iban a privar de nada: hotel de lujo, playa, parques, polígono de tiro.

En Miami Beach se hospedaron en el Fontainebleau, un lugar de lujo ubicado frente al mar sobre la avenida Collins, y donde pasar una noche en la habitación más económica supera los seis mil pesos.

En las redes sociales subieron una foto con la leyenda “previando” y tomando un champagne Dom Pérignon (que en Argentina se comercializa a más de cuatro mil pesos la botella). Alan y Demián, sentados en el lobby del hotel, levantan la copa ante la cámara con un primer plano de la botella.

También pasearon por las calles de Miami a bordo de un Chevrolet Camaro descapotable y visitaron los parques de Disney y Universal. Además se sacaron fotos en la puerta de la taberna de Moe (el bar de la serie Los Simpson).

En Orlando, y por si fuera poco, probaron su puntería en el polígono de tiro Machine Gun America, ubicado a unas diez cuadras de los parques donde el protagonista es Mickey. Allí se puede elegir entre pistolas, rifles y ametralladoras. Para expertos y novatos. El valor de la actividad arranca en los 200 dólares para disparar unos 25 tiros.

Las vacaciones se interrumpieron el martes pasado a las 7 de la mañana, cuando Alan pisó suelo argentino en un vuelo de American Airlines. Efectivos de la Dirección Departamental de Investigaciones (DDI) de Quilmes, la Sub DDI de San Isidro y de la Policía de Seguridad Aeroportuaria lo detuvieron antes de que llegara a migraciones.

El joven dejó sus valijas a un costado y no opuso resistencia. Les mostró a los efectivos que dentro de su equipaje sólo tenía ropa y algo de tecnología. Su amigo fue un testigo privilegiado del arresto, aunque éste no está implicado en la causa y tampoco cuenta con antecedentes.

Según fuentes del caso, Alan quedó detenido acusado por el crimen del empresario Aldo Venturini, ocurrido en el mes de enero pasado en Florencio Varela, y se investiga si formó parte de los otros atracos que se le atribuyen a la banda.

Orejón. A Alan sus amigos lo conocen por su apodo: “Orejón”. No tiene antecedentes penales y proviene de una familia de Ciudadela. “Es un gran piloto”, declararon algunos testigos en la causa que lo tiene como acusado, según pudo saber PERFIL. Tal vez por esa cualidad se convirtió en el “chofer” de la Banda del Fal.

El 30 de enero esta organización emboscó al empresario Venturini (que tenía una distribuidora de cigarrillos) cuando circulaba junto a dos custodios con la recaudación. Los delincuentes lo acribillaron, se llevaron seis millones de pesos y escaparon. Desde la DDI de Quilmes, a cargo del comisario mayor Javier Cardozo, empezaron a seguirles los pasos.

Pero esta banda ya contaba con antecedentes en la zona norte del conurbano bonaerense y en Capital Federal. Les atribuyen golpes a cajeros automáticos con mazas y secuestros extorsivos.
Alan fue el último en caer de la organización. El lunes habíamos detenido a los otros cuatro miembros”, cuenta a este diario el comisario mayor Cardozo. “Los testigos de identidad reservada nos aportaron el nombre de Alan y lo sindicaron como el chofer de la banda. Luego aportaron su número de celular y así llegamos a su identidad completa. Logramos saber que había tomado un vuelo a Miami con un amigo”, detalla. A través de las escuchas telefónicas se pudo determinar que el joven había viajado al exterior y “regresaría vía aeropuerto de Ezeiza”.

Ahora Alan dejó el lujo de los hoteles de Miami para pasar sus noches en una celda del Servicio Penitenciario Bonaerense. En las próximas horas tendrá que dar explicaciones ante la Justicia.