Esta semana, los padres de Lola Chomnalez creyeron haber alcanzado un poco de paz, aunque el sentimiento se diluyó el jueves cuando Richard Gutiérrez, conocido como “El Conejo”, fue liberado luego de declarar. Más tarde, se conoció que la jueza Marcela López Moroy dejaba el caso. “Están muy golpeados y confundidos”, reveló a PERFIL una persona cercana a Diego Chomnalez y a Adriana Belmonte. El matrimonio se refugió en su casa de Caballito y evitó hacer declaraciones. El miércoles, PERFIL pudo conversar con un allegado a la familia quien aseguró que estaban “conformes” con la investigación y que “confiaban” en la Justicia uruguaya. Por esas horas, la policía del país vecino había detenido a Gutiérrez, el hombre al que señalaban como el autor del homicidio. Tras su liberación, el abogado de la familia de Lola, Jorge Barrera, dijo a la prensa que el avance de la investigación no arrojó “resultados favorables” y que se deberán “seguir distintas pistas de investigación para determinar la verdad de los hechos”. “Los resultados no son los que esperábamos, ni son resultados favorables frente a un reclamo justo de la familia de saber la verdad”, aseguró Barrera a la salida de los tribunales de Rocha. Si bien el abogado cree que “hay que seguir agotando todos los caminos y las distintas pistas de investigación, no cerrar ninguna”, destacó que “más allá de situaciones puntuales lo importante son las respuestas y hoy no las tenemos”, concluyó.
