SOCIEDAD
meditacion y memoria

Los padres de Lola, en un sentido homenaje espiritual

Fue organizado por un amigo de los padres de la adolescente. Cómo fue la ceremonia.

Juntos. La abuela y el padre de Lola, al ingresar a la sala de meditación.
| Facebook

En medio del dolor por el crimen, la familia de Lola (15) participó esta semana de una jornada de meditación que organizó un amigo de los padres de la chica asesinada en Barra de Valizas. Fue el miércoles pasado en el barrio porteño de San Telmo. Estuvieron presentes Diego Chomnalez, su esposa, Adriana Belmonte, los hermanos de Lola y su abuela, la reconocida chef Beatriz Chomnalez.

La diksha –como se denomina a este tipo de ritual– fue coordinada por el grupo Love Soldiers. Entre las 20 y las 22 del miércoles, los familiares más cercanos de Lola estuvieron juntos recordando a su hija.
Mesmar Phillip, el organizador, señaló que el encuentro contó con la voz guía de Matías Haglund y los cantos de Jin Wu. “Es un dulce momento de luz para la elevación celestial sin obstáculos del almita de Lola Lunita”, anunció. En la diksha se recitó un poema que Mesmar compuso para Lola.  “Mucho amor se sintió. Todos, familiares y amigos unidos”, escribió uno de los participantes, en su cuenta de Facebook.

Esto no le gusta a los autoritarios
El ejercicio del periodismo profesional y crítico es un pilar fundamental de la democracia. Por eso molesta a quienes creen ser los dueños de la verdad.
Hoy más que nunca Suscribite

¿Qué significa diksha? Según explica Love Soldiers, se trata de un acto de meditación en el que se realiza “una transferencia de energía por contacto (imposición de manos en la cabeza) o por el poder de la intención, que transfiere energía física, despertando conexión con la unidad en todo, permitiendo profundizar nuestra relación con aquellos que amamos, con nosotros mismos, con extraños y con nuestro creador”.   

“Funciona también para ayudar en la sanación del cuerpo y en la descarga de patrones emocionales repetitivos, trayendo como resultado un mayor alivio y comodidad con uno mismo. En las relaciones, crea una mayor sensibilidad y conexión con el otro, liberándonos de las limitaciones de los juicios y condicionamientos”.

Los padres, la abuela y sus hermanos despidieron los restos de Lola hace una semana, en el cementerio de Recoleta. Sumidos en un profundo dolor y sin ánimo de dialogar con la prensa, no hablaron sobre la fallida investigación de la Justicia uruguaya, que hasta el momento no pudo dar con el autor ni obtener una pista firme para establecer el móvil del asesinato.