El chico
apuntó con un revolver a un compañero y luego efectuó un tiro al aire. El director
de la escuela aseguró que, de expulsarlo, el "problema se agudizará" porque el chico perderá
"contención".
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Cedoc
El alumno del colegio neuquino que apuntó con un arma a un compañero y luego disparó al aire no será expulsado del establecimiento, declaró hoy su director, Francisco Carvallo, y argumentó la decisión al sostener que, de echarlo, el "problema se agudizará" porque el chico perderá "contención".
Carvallo precisó además que el incidente se produjo a "unos 200 metros de la escuela, luego de que se retiraran" del establecimiento, y que el arma utilizada, un revolver calibre 22, "alguien se la trajo", ya que "en algunos barrios circulan por la calle".
"Hoy en día parece que estos conflictos se dirimen con navajas, con patotas o con armas...", comentó el director de la escuela provincial de educación técnica número 3, Gregorio Álvarez, ubicada en el sector noroeste de Neuquén, cuyos dos alumnos se enfrentaron el lunes pasado, aunque la denuncia recién se radicó ayer.
Carvallo comentó a radio Continental que los dos alumnos, de 16 años, "tenían unas diferencias entre ellos desde hace tiempo, desde la escuela primaria" y "son vecinos, viven en la misma cuadra en el barrio" Gregorio Álvarez, conformado por viviendas modestas.
"Uno de ellos trató de arreglar estas diferencias de esta manera. Lo esperó con un arma, apoyó el arma en la cabeza del alumno, luego la apartó unos centímetros, y realizó el disparo", relató la autoridad educativa.
El director añadió que, en ese momento, "había un grupo de alumnos mirando, intervinieron algunos vecinos, que llamaron a la policía, y los chicos salieron corriendo"."El arma no se encontró, porque al momento de llegar el móvil policial, salieron todos corriendo y alguno de ellos se la llevó", señaló.
Inmediatamente después, apuntó, "citamos a los padres del alumno agresor y como no los encontramos, dimos intervención a la comisaría del menor y a una comisaría próxima para que lo traigan, para que esta situación se corte ahí".
Sobre el arma, añadió que "no es de la casa" del chico agresor, ya que, especuló, "es corriente en algunos barrios de Neuquén que las armas circulen por la calle", por lo que "aparentemente alguien se la trajo".
Respecto del alumno, reconoció que "tiene problemas de conducta", pero advirtió que "si lo expulsamos, su problema se agudizará", ya que "no hay otras instituciones que ayuden a contener este tipo de casos".
"Nos encontramos en una disyuntiva, porque también tenemos que pensar en la seguridad de los 580 alumnos que tenemos en la escuela", reconoció el director, que propuso la conformación de un " gabinete interdisciplinario para atender estos casos".
