SOCIEDAD
dormir con la mascota

Parejas, solos o familias con hijos eligen el colecho canino

Los perros son uno más del grupo familiar y, como tales, comparten espacio tan íntimo como la cama. Qué opinan veterinarios y pediatras.

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Mejores amigos. Historias de personas que suman al perro a la cama como uno más de la casa. | aballay

Hasta hace no muchos años no se dudaba: en casa, el perro dormía en la cucha. Pero esa costumbre cambió: hoy, para muchos, son un miembro más de la familia y como tales se los considera a la hora de planificar paseos y vacaciones, y hasta para irse a la cama. El colecho está de moda, y no sólo con bebés o chicos. Las mascotas –especialmente las caninas– son un acompañante que ocupa, muchas veces, ese otro lado de la cama, no importa cuántos miembros de la familia la compartan.

“Me gusta dormir con mi perra porque me trae una sensación de placer, bienestar y paz”, cuenta a PERFIL la modelo Nicole Neumann sobre su chichuahua Almendra, la única de los cuatro perros que conviven con ella con quien comparte su cama. “Me da mucha ternura porque es como si fuera un bebé y al momento de dormir necesita estar en contacto conmigo o con alguna de mis hijas, se siente protegida”, agrega.

Además de Almi, como ella la llama, en su casa están Bruto, un bulldog inglés, y Ramón y Bono, dos mestizos, que se suman a los 34 que viven en su chacra. Para ella, son “miembros de la familia” y se tienen en cuenta “para todo, a la hora de mudarse y viajar”.  

Lo mismo siente Gabriela Arrastúa (30), que tiene a Lira desde hace cinco años, una labradora que siempre durmió con ella y su novio. En pocos días nacerá su hijo Leandro, y cuenta que desde los primeros meses de embarazo empezaron a idear un plan para que ella no sufra el impacto.

“Vamos a traerle cosas del bebé para que conozca su olor y limpiarla bien antes de subir a la cama. Queremos que siga durmiendo como siempre, después de tantos años nos parece injusto tener que sacarla porque es el lugar que ella se ganó”, explica la joven.

“Hoy las mascotas son consideradas como miembros de la familia porque son estables en el afecto, aceptan a la persona en sus buenos y malos momentos, y a cambio sólo piden amor, presencia y un poco de comida”, explica la psicóloga Adriana Guraieb.

Agustina Cuello (25) vive sola con su perro Serú desde hace cuatro años. Desde el primer momento durmieron juntos, y tiene prioridad sobre su novio.

Para Guraieb, con este fenómeno surge un nuevo concepto de “familia ampliada”, que va más allá de compartir el espacio de descanso. “Cada vez son más las parejas que antes de tener un hijo deciden tener un perro y es como si ensayaran el paso previo antes de ser padres”. Y aclara: “Antes sólo se hablaba de familias ensambladas, donde se mezclaban los chicos de uno y del otro, pero ahora los clanes también se agrandan con la llegada de la mascota, que muchas veces ya está incorporada antes del nacimiento del bebé”.

Lo mismo pasó con Florencia Barmanche (30), quien está embarazada de cinco meses y todas las noches duerme con su cocker Tomás, pegado a sus piernas. “Dormimos todos juntos –Gastón, mi pareja; Tomi y Lupe, nuestra hija de cuatro años que se pasa en medio de la noche”, ríe. Y afirma: “No existe la vida sin Tomi y todos nos adaptamos a él”.

Cuidados. Entre los pediatras hay debate sobre si es adecuado o no que los perros compartan la cama con bebés y nenes chicos: “No recomendamos que el bebé duerma con un perro por cuestiones de seguridad, higiene y porque cada uno tiene su lugar en la casa”, afirma el médico Diego Montes de Oca.  Además, el especialista explica que si bien “las enfermedades infecciosas asociadas a los perros no son comunes”, los bebés suelen ser “más sensibles” frente a cualquier tipo de bacteria.

Los veterinarios, sin embargo, coinciden en que no hay inconvenientes a la hora de dormir con las mascotas, siempre y cuando se tengan ciertos recaudos. “Sólo se debería corregir esta costumbre si el perro demuestra agresividad cuando siente que se le invade su lugar de descanso y si no respeta la orden de bajar o subir cuando se le pide”, explica el veterinario y entrenador Hernán Naccarato. “Es muy difícil, aunque no imposible, hacer que un perro deje de dormir en la cama”, aclara.


Estrellas en las redes sociales

Tanto en el país como en el mundo, decenas de famosos comparten en sus redes sociales su fanatismo por “colechar” con los perros. La actriz y modelo Calu Rivero considera a Liona, su bulldog francés, como una “hija”, y comparte sus fotos en Instagram con ella  en la cama. La perrita va con ella a todos lados.

La modelo y conductora María del Cerro tiene a Rudo,  una mezcla entre caniche, maltés y bichon, que le cambió la vida. “Es trillado pero es así: te dan un amor incondicional sin pedir nada a cambio”, comentó a la revista Oh My Dog. Incluso, contó que desde el nacimiento de su hija Mila no cambiaron sus costumbres.“Hoy, Mila lo persigue y él le tiene toda la paciencia, dormimos los cuatro juntos”, contó a ese medio. También, varias estrellas de Hollywood como Salma Hayek, Miley Cyrus y Demi Lovato sorprenden a sus seguidores en las redes con fotos de ellos y sus mascotas desde la cama.