Lima – Un grupo de especialistas peruanos
mostró su preocupación por el aceleramiento del deshielo en los glaciares andinos.
Además, desde la Unidad de Glaciología del Instituto Nacional de Recursos Naturales (Inrena,
perteneciente al Estado), alertaron acerca de la posibilidad que en,
en diez años, desaparezca uno de los centros turísticos nevados más importantes de la
región.
Los glaciares tropicales peruanos –que alcanzan a un
70 por ciento de los presentes en la región andina– resultan entre los más
afectados por el fenómeno, ya que
responden más rápido a los cambios climáticos y corren peligro de desaparecer en
algunas décadas. La información fue suministrada por la misma institución oficial que investiga el
fenómeno.
De hecho, los científicos sostienen que, en lo que va del siglo, el incremento de la
temperatura global podría ser de
1,5 a 5,8 grados centígrados, lo que provocaría que
muchos glaciares ubicados por debajo de los 5 mil metros de altura
desaparezcan de la faz de la tierra.
“En Perú, pese a encontrarse en la región del trópico del sur, debido a la Cordillera
de los Andes, con altitudes superiores a los 6 mil metros, existen aún áreas glaciares
significativas, las cuales están experimentando un dramático proceso de ablación y retroceso como
consecuencia del cambio climático a escala regional y mundial”, sostiene Marco Zapata,
director la Unidad de Glaciología de Inrena.
El especialista informó, además, que la preocupación se centra en los resultados que arrojó
un estudio de la institución que reveló que la corona de hielo y nieve de la cumbre del nevado
Pastoruri (5.240 metros de altura)
disminuyó un 40 por ciento entre 1995 y 2005, debido al calentamiento global.
El Pastoruri es uno de los cerros nevados más importantes en la Cordillera Blanca, en el
departamento de Ancash, al noreste del país, y también se erige como centro del turismo de la
región. Esta montaña “no está considerada un glaciar propiamente dicho sino simplemente una
capa de hielo dentro de la cordillera”, pero que es un referente de lo que está sucediendo en
los andes peruanos, sostienen desde el Inrena.
“En 1995 hicimos una medición en el Pastoruri que arrojó 1,8 kilómetros cuadrados de
superficie cubierta de hielo, en 2001 pasó a 1,4 y en el 2005 llegó a 1,1 kilómetros
cuadrados”, explicó Zapata. Para el científico, de continuar esa tendencia, el
glaciar habrá desaparecido en diez años.
Al mismo tiempo, sostuvo que “
aún no se tiene definido en qué porcentaje la afluencia diaria del turismo contribuye a una
desaparición más rápida del nevado” y, por ese motivo, consideró que probablemente
varios glaciares de los Andes peruanos, de menos de cinco mil metros de altitud, corran la misma
suerte del Pastoruri.
Zapata agregó además que la superficie helada de la Cordillera Blanca –una especie de
ramal de los Andes donde se ubica el Pastoruri– pasó de 723 kilómetros cuadrados en 1970 a
611 en 1997, lo que equivale a una merma de 15,46 por ciento menos.
De esta manera, el Inrena informó que Perú contaba, en 1970, con unos 2.041 kilómetros
cuadrados de superficie glaciar, que en 1995 se vio disminuida a 1.594 kilómetros cuadrados. Entre
1948 y 1976 el retroceso de los glaciares era de ocho metros por año en promedio. Desde 1977 hasta
la fecha
este retroceso llega a 20 metros por año.
Entre los fenómenos, los científicos también advierten que los deshielos podrán generar
desembalses de lagunas, provocando inundaciones y avalanchas sobre las poblaciones asentadas en las
faldas de los picos nevados, por lo que recomendó a tomar medidas para prevenir estas catástrofes
naturales.
Fuente: AFP