Sitio hackeado

La organización Abuelas de Plaza de Mayo denunció que su sitio está siendo “atacado externamente” y la Justicia Federal investiga si realmente se produjo sabotaje informático. La presentación fue radicada hoy en el juzgado federal de María Servini de Cubría por la presidenta del organismo, Estela Carlotto.

 

Desde el organismo sostuvieron que con este sabotaje se está impidiendo el acceso a todos aquellos que buscan información sobre derechos humanos. Carlotto, por su parte, exigió urgentes medidas de prueba para encontrar al responsable de ese delito informático.

 

La presentación remarcó que “el ataque informático fue advertido el viernes cuando dejó de funcionar la página de Internet” y el servicio de correo electrónico. El lunes pasado la empresa a cargo de proveer el servicio anunció al organismo que “la página había sido atacada externamente y que había afectado a todos sus clientes, impidiéndoles acceder al servicio de Abuelas”.

 

De acuerdo a la información, el ataque se concretó cuando se solicitó “masivamente información de la página, consumiendo todo el ancho de banda de manera que el servidor no pudiera dar repuesta”. Este mecanismo se manifiesta a través de “un programa informático que dispara llamados constantes desde una o varias computadoras”.

 

“Están pasando cosas que nos preocupan, hechos por sectores de las mafias que todavía operan –denunció la titular de Abuelas–. A mí me quisieron matar hace unos años y las Abuelas de Córdoba están sufriendo amenazas. Pero esto ya no es una amenaza, es un ataque y no a una persona en particular sino a toda la institución”.

 

Ahora, tanto la Fiscalía como la jueza Servini de Cubría tendrán que esclarecer si hay elementos para aplicar las figuras de “daño” y “estrago”, con penas de hasta dos años de cárcel para los responsables de interrumpir una comunicación y de destruir o inutilizar archivos de uso público.