TECNOLOGíA
LIBERTAD DE EXPRESIÓN

La creciente desinformación orquestada por los políticos amenaza las democracias

Lo asegura el último informe de la ONG Freedom House, que encontró solo 16 países (entre ellos, Argentina) con "mejoras en sus puntajes de libertad de Internet".

informe freedom house
- | Freedom House

Los gobiernos alrededor del mundo recurren cada vez más a las redes sociales para manipular elecciones y monitorear a sus ciudadanos, en una tendencia preocupante para la democracia, según un informe publicado este martes por la organización Freedom House. En su reporte anual sobre libertad en línea, la organización encontró evidencia de "programas avanzados de vigilancia en redes sociales" en al menos 40 de 65 países analizados.

"Agentes monitorearon con mayor frecuencia plataformas en redes sociales y revisaron dispositivos electrónicos de viajeros sin garantías para recopilar información sobre actividades constitucionalmente protegidas como las protestas pacíficas y el periodismo crítico", detalló Freedom House, que ubica a la Argentina entre los 15 países más libres al respecto, junto a naciones como EEUU, Canadá, Australia, Reino Unido y Francia, entre otros.

El informe dice que la libertad en internet se redujo por noveno año consecutivo, con autoridades en algunos países simplemente eliminando el acceso a la red como parte de sus esfuerzos para manipular, mientras otros usan ejércitos de propaganda para distorsionar información en las plataformas sociales. "Muchos gobiernos están descubriendo que en las redes sociales, la propaganda funciona mejor que la censura", dijo Mike Abramowitz, presidente de Freedom House.

La investigación de Freedom House indica que "los gobiernos más represivos están adquiriendo herramientas de vigilancia de redes sociales que emplean inteligencia artificial para identificar amenazas percibidas y silenciar expresiones indeseables". Incluso en las democracias, agrega "este monitoreo masivo se está extendiendo a través de las agencias gubernamentales y se está utilizando para nuevos propósitos sin las garantías adecuadas". 

"Autoritarios y populistas en todo el mundo está explotando la naturaleza humana y los algoritmos computarizados para conquistar las urnas, pasando por encima de las normas diseñadas para asegurar elecciones libres y justas", añadió. La desinformación fue la táctica más usada para afectar elecciones "Populistas y líderes de ultraderecha han aumentado su entusiasmo no solo por crear desinformación viral sino también por alimentar redes que la difundan", dice el informe "Freedom on the Net 2019".

En 47 de los 65 países, individuos fueron arrestados por sus creencias políticas, sociales o religiosas compartidas on line; y las personas resultaron propensas a sufrir violencia física por sus actividades en línea en al menos 31 países. China se mantuvo como el peor país en términos de libertad en internet por cuarto año consecutivo, con aumentos del control del gobierno en medio de las protestas en Hong Kong y antes del 30 aniversario de la masacre de Tiananmen, detalló el informe.

La libertad en Internet decayó en 33 de los 65 países revisados, según el informe, y los mayores declives se registraron en Sudán y Kazajistán, seguidos por Brasil, Bangladés y Zimbabwe.  En Estados Unidos, en tanto, "funcionarios y agencias de inmigración ampliaron su vigilancia sobre las personas" y la desinformación creciente estuvo enfocada principalmente en las elecciones legislativas de 2018. 

Islandia se convirtió en el mejor protector mundial de la libertad de Internet, dice el informe, "ya que no registró casos civiles o penales contra usuarios para su expresión online". "El país cuenta con condiciones envidiables, que incluyen conectividad casi universal, restricciones limitadas en el contenido y fuertes protecciones para los derechos de los usuarios. Sin embargo, un sofisticado esquema de phishing a nivel nacional desafió este entorno libre y su infraestructura de ciberseguridad en 2018", reza el informe.

Claves del informe de Freedom House:

  • Las redes sociales una plataforma extremadamente útil y económica para las operaciones de influencia maligna por parte de actores extranjeros y nacionales por igual. 
     
  • Las autoridades de China, Irán, Arabia Saudita y una creciente lista de otros países han ampliado sus esfuerzos para manipular el entorno en línea e influir en los resultados políticos extranjeros durante el año pasado.
     
  • Los gobiernos más represivos están adquiriendo herramientas de vigilancia de redes sociales que emplean inteligencia artificial para identificar amenazas percibidas y silenciar expresiones indeseables. 
     
  • Además de facilitar la difusión de propaganda y desinformación durante los períodos electorales, las plataformas de redes sociales han permitido la recopilación y el análisis de grandes cantidades de datos sobre poblaciones enteras.
     
  •  La vigilancia masiva sofisticada que alguna vez fue posible solo para las principales agencias de inteligencia del mundo ahora es asequible para una gama mucho más amplia de estados. 
     
  • En las democracias, este monitoreo masivo se está extendiendo a través de las agencias gubernamentales y se está utilizando para nuevos propósitos sin las garantías adecuadas. El resultado es un fuerte aumento global en el abuso de las libertades civiles y la reducción del espacio en línea para el activismo cívico.
     
  • Si bien potencias autoritarias como China y Rusia desempeñan un papel enorme en atenuar las perspectivas de que la tecnología brinde mayores derechos humanos, las principales plataformas de redes sociales del mundo tienen su sede en los Estados Unidos, y su explotación por parte de las fuerzas antidemocráticas es en gran parte un producto de Descuido americano. 
     
  • Las tecnologías emergentes, como la biometría avanzada, la inteligencia artificial y las redes móviles de quinta generación brindarán nuevas oportunidades para el desarrollo humano, pero sin duda también presentarán una nueva gama de desafíos de derechos humanos. 

D.S.