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Gabriel Solano: "Defiendo a morir al compañero del mortero, en cana tienen que ir Caputo y Sturzenegger"

El candidato a jefe de Gobierno porteño del Frente de Izquierda pasó por la Escuela de Comunicación. Y criticó a Matías Lammens: "Es un panqueque, un paracaidista".

Gabriel Solano en la Escuela de Comunicación de Perfil
Gabriel Solano en la Escuela de Comunicación de Perfil | Juan Ferrari

Gabriel Solano, el candidato a Jefe de Gobierno porteño por el Frente de la Izquierda, asistió al ciclo de charlas de la Escuela de Comunicación de Perfil. Pocos días después del cierre de listas, el legislador porteño ratificó el llamado de 2015 a votar en blanco en el ballotage. Además, en la entrevista con los alumnos de periodismo habló sobre las similitudes entre el bloque oficialista y el kirchnerismo, criticó la falta de militancia de Matías Lammens, el candidato del kirchnerismo en la Ciudad, y defendió al militante prófugo del mortero.

- ¿Alberto Fernández le resta votos al kirchnerismo o piensa que fue una decisión acertada? 

- Vamos a luchar para que reste. Si Fernández se fue del gobierno cuando se pelearon con el capital agrario en 2009, y después se fue con Massa, ¿por qué no los traicionaría ahora? Los va a traicionar, y lo peor es que ellos lo saben. He hablado con amigos kirchneristas que sobre el pasado de Fernández me dijeron “es peor de lo que vos decís. No sólo cena con Magnetto, también almuerza y desayuna”. No están contentos.

- ¿Cómo define la candidatura de Lammens?

- Un panqueque. Casi está con Lavagna, casi está acá, casi esta allá. No le conozco la voz, jamás habló de política. No sé qué dijo sobre las luchas del movimiento estudiantil, ni cuando la Corte Suprema habilitó el fallo del 2x1, ni sobre la lucha de las enfermeras por pasar a la carrera de salud, ni cuando la villa 20 ocupó el barrio Papa Francisco para pedir vivienda, ni del 14 y 18 de diciembre de 2017. No sé qué dijo de nada. Es un paracaidista, un cheque en blanco. Es como cuando Menem fue a buscar a Palito Ortega o a Scioli, ese tipo de cosas terminan mal. 

- ¿Cómo va a hacer la izquierda para escaparle a la polarización electoral?

- Polarización había en 1945 cuando se hablaba de “Braden o Perón”. Hoy no es tan así. Hasta hace unos días Massa discutía si iba con Lavagna, Vidal o Cristina Fernández. Eso demuestra que no había divergencias sustanciales entre estos bloques. Si se analizan los programas, no hay diferencias importantes. El FIT plantea que hay que romper con el FMI, mientras que Macri dice que hay que ir con ellos hasta el final y Fernández dice más o menos. Nosotros planteamos que la deuda externa es impagable, y que es un negociado financiero en favor de un grupo de bancos y especuladores ¿Qué pasa con la reforma previsional? Le tenemos que explicar a los trabajadores lo que está en juego durante la campaña, que se quiere aplicar un ajuste muy fuerte y que lo que se está viendo es quién lo va a aplicar. Fernández y Pichetto no suman ningún voto nuevo, los incluyeron porque es lo que llaman ahora “darle robustez” a una fórmula, en función de lo que tienen que hacer si es que ganan: porque lo que tienen que aplicar no es algo bueno para el pueblo.

 

- En el ballotage de 2015 llamaron a votar en blanco, ¿considera esa posición un acto de responsabilidad? ¿Cuál sería el mensaje si este año se presenta una situación similar?

- En 2015 salvamos a la izquierda argentina. Hemos cometido el mayor acto de responsabilidad: si Scioli ganaba por nuestros votos nos teníamos que exiliar, como mínimo, en Uruguay. Después de las elecciones toda la fuerza política que lo había apoyado cogobernó con Macri. Para este año cuesta dar una respuesta aún. A priori nosotros votaríamos en un ballotage por aquel que plantee el no pago de la deuda, romper con el FMI, el 82% móvil para los jubilados, el salario mínimo igual a la canasta familiar y el aborto legal.

 

- En ese momento había que elegir entre dos candidatos que llegaron por el voto popular.

- O no. El mecanismo constitucional del ballotage es antidemocrático: se induce a la población a votar por fuerzas políticas que no quiere votar. Se busca incrementar la representación de una fuerza que no la tiene porque por algo no la consiguió en primera vuelta. Queremos anular el ballotage porque es una trampa para el pueblo.

- ¿Qué piensa sobre las PASO? 

- Al final no las usa nadie y se gasta un montón de plata. Además, se quiere impulsar al electorado a tener que votar por partidos en los cuales no están afiliados. Preferimos que los partidos asuman la responsabilidad de nominar a sus candidatos, sobre la decisión que tomen sus afiliados libremente y que luego la ciudadanía participe de la elección general. Pero las PASO no corresponden, son un principio de estatización de los partidos políticos. 

- ¿Qué reflexión tiene acerca del sindicalismo?

- Moyano acompaña la fórmula Fernández-Fernández, Barrionuevo apoya a Lavagna y a Stolbizer. Es una mezcla rara que, quien hace campaña sobre la honestidad como principio, termine con Barrionuevo que se hizo famoso por decir que hay que dejar de robar por dos años. Macri también tiene el apoyo del sindicalismo por la rama del “Momo” Venegas. El FIT tiene dirigentes sindicales que tienen conceptos anti burocráticos, de lucha. Moyano y Barrionuevo viven como empresarios.

Gabriel Solano en la Escuela de Comunicación de Perfil

 

- Hubo un militante de la izquierda que en diciembre de 2017 fue tomado por las cámaras de TV tirando un mortero y hoy está prófugo ¿Qué piensa de eso?

- Ese compañero debería haberse presentado a la Justicia: ir ahí es una lucha en sí misma. De todas maneras, entre este compañero y Macri, Moyano, los que se roban la guita de los Panamá Papers, la Unión Industrial o Caputo, me quedo con él, que lo único que hizo es tirar con un mortero... ¡¡Un mortero!! Ha sido atacado mediáticamente y se asustó. En cana tienen que ir Caputo o Sturzenegger, no él. Lo defiendo a morir.

- Con esa afirmación, ¿no está haciendo apología de la violencia?

- No. Él debería haberse presentado porque no se lo podía acusar de nada. Fue víctima del linchamiento mediático. Era un luchador de la General Motors que defendió a los trabajadores. En el FIT a un luchador obrero lo defendemos. No olvidemos que era contra la reforma previsional.

Por Marina Diksaitis y Gustavo Ruffo

(Alumnos de primer año de la Escuela de Comunicación de Perfil)