La ex estrella estadounidense de la biotecnología Elizabeth Holmes comenzó este martes 30 de mayo a cumplir su sentencia de once años de cárcel en una prisión del estado de Texas, a donde fue enviada por estafar a inversores de su empresa, Theranos, por varios millones de dólares. Si bien los abogados de la imputada pretendían anular la condena, un juez le dio el ultimátum para que se presente en la Oficina de Prisiones antes del 30 de mayo, fecha en la que Holmes concurrió al penal. En simultáneo, la mujer deberá pagar 452 millones de dólares a los inversores estafados.
La mujer de 39 años llegó a la prisión federal de mujeres en Bryan, cerca de Houston, después de que una corte negara su última petición para permanecer libre mientras apelaba la condena por fraude.
"Podemos confirmar que Elizabeth Holmes ha llegado a la Prisión Federal Camp Bryan y está en custodia de la Oficina Federal de Prisiones", informaron las autoridades en un comunicado.
Auge y caída de Elizabeth Holmes
Holmes se convirtió en una estrella de Silicon Valley cuando anunció que Theranos iba a desarrollar tecnología para perfeccionar las pruebas de sangre a través de un dispositivo de diagnóstico médico de amplio rango, y que apenas requería unas gotas de sangre.
El método prometía ser instantáneo, es decir, el análisis de las muestras -según la emprendedora- permitía revelar en minutos qué enfermedades padecían los pacientes sometidos a la pruebas sanguíneas.
Como fundadora de esta empresa, Holmes se convirtió en una celebridad de la tecnología y fue capaz de atraer inversiones de reconocidas figuras políticas y de algunos de los personajes más ricos del mundo, entre ellos Rupert Murdoch; el fundador de Oracle, Larry Ellison; y la cadena de farmacias Walgreens.
Theranos también alcanzó fama por la entidad de los miembros de su junta directiva, como los ex altos funcionarios estadounidenses Henry Kissinger, George Shultz y Jimm Mattis.
Hasta se la llegó a mencionar como "la nueva Steve Jobs" debido a su inteligencia y la forma de vestir similar al fundador de Apple.
La historia de Elizabeth Holmes llegó a la pantalla chica en forma de miniserie, la cual tuvo mucho éxito: ganó como mejor miniserie en los Critics Choice Awards, mientras que la actriz Amanda Seyfried, que encarna a ex estrella estadounidense de la biotecnología, ganó como mejor actriz en miniserie en los Emmys, Golden Globes y los Critics Choice Awards.
Sin embargo, la suerte de la mujer que desertó de la Universidad de Stanford llegó a su fin cuando una investigación de The Wall Street Journal cuestionó la capacidad de los dispositivos de Theranos y la validez de las pruebas de sangre.
Además de su tiempo en prisión, la Justicia ordenó a Holmes a pagar 452 millones de dólares a los inversores defraudados.
Según The Wall Street Journal, la mayoría de los reclusos de Bryan están condenados por delitos de cuello blanco, cargos menores relacionados con drogas y por acoger a inmigrantes ilegales.
En 2014, Forbes valoró la fortuna de Holmes en 4.500 millones de dólares y la describió como la mujer multimillonaria más joven que no heredó su fortuna.
CA/ED