La oferta de marihuana legal en Canadá solo cubrirá entre el 30 y el 60 por ciento de la demanda después de la legalización, lo que mantendrá activo el mercado negro y restringirá la recaudación de impuestos del gobierno, según lo revelado por un nuevo estudio.
La oferta de cannabis alcanzará unas 210 toneladas en el primer año después de que Canadá legalice la marihuana este mes, según un estudio que será publicado la próxima semana por investigadores de la Universidad de Waterloo y el C.D. Howe Institute. En tanto, la demanda, ascenderá a unas 610 toneladas.
"No habrá suficiente oferta legal, especialmente durante el primer semestre del año posterior a la legalización, principalmente debido a la baja tasa de productores con licencia", dijeron en su informe Anindya Sen de la Universidad de Waterloo y Rosalie Wyonch del C.D. Howe Institute con sede en Toronto.
Los productores de marihuana han estado haciendo grandes esfuerzos para aumentar el suministro en medio de una lenta implementación de las regulaciones de los gobiernos provinciales, que coordinarán las ventas minoristas cuando se legalice el consumo el 17 de octubre. Mientras tanto, los canadienses probablemente no abandonarán tan rápidamente a sus distribuidores ilegales, y las ventas en línea ya alcanzan altos volúmenes.
Los investigadores advirtieron que estimar la oferta fue un desafío, para lo cual utilizaron datos sobre el mercado médico de la agencia de salud de Canadá, incluida la producción, el inventario y las ventas, junto con estimaciones de los tiempos de crecimiento, las licencias y la capacidad para proyectar la oferta de uso recreativo. Para la demanda, los analistas incorporaron estimaciones del gobierno federal y tomaron en consideración las experiencias en los estados de Washington y Colorado en Estados Unidos, donde la marihuana es legal.
Usando un precio de 9 dólares canadienses (US$6,96) por gramo, cerca del precio objetivo del gobierno federal de 10 dólares canadienses, los gobiernos perderían alrededor de 774 millones de dólares canadienses en ingresos por impuestos al consumo y ventas, y los impuestos provinciales, debido al déficit de oferta, según calcularon los investigadores. En el presupuesto del año pasado, el gobierno federal estimó que recaudaría aproximadamente 220 millones de dólares canadienses anuales para 2022-2023 a partir de los impuestos sobre la marihuana legal.
Los autores sugieren que para aumentar la oferta legal, Health Canada podría agilizar aún más el proceso de solicitud y aprobación de licencias de producción y venta, y legalizar en un corto plazo los productos comestibles de cannabis y otros derivados, para alejar a los consumidores del mercado negro.