CIENCIA

Para qué sirve Arsat-1, el primer satélite de telecomunicaciones argentino

Fue diseñado por INVAP,su señal abarca a todo el Mercosur y llega hasta la Antártida. En qué nos cambia la vida.

El Arsat-1
| CeDoc

Esta tarde, desde la Guayana francesa, despegó Ariane 5, el cohete que lleva al Arsat-1, un satélite diseñado y ensamblado en Argentina con componentes fabricados por las europeas Astrium y Thales Alenia Space, siendo el último eslabon de una cadena de satélites argentinos iniciada a principios de la década de 1990, con la creación de la Comisión Nacional de Actividades Espaciales.

El Arsat-1 es un satélite de comunicaciones diseñado y construído por INVAP, y que será operado por AR-SAT, una empresa del Estado, mientras acompaña la órbita de la Tierra desde el slot geoestacionario de la longitud 72° Oeste, a 36 mil kilómetros del suelo.

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El Arsat-1 es un espejo que recibe la radiación electromagnética. A través de sus sistemas luego la distribuyen en un área más grande, que en el caso de este satélite, incluye la cobertura de Argentina, Chile, Paraguay y Uruguay.

Las prestaciones del nuevo satélite servirán, básicamente, para la transmisión de datos, las telecomunicaciones, los servicios de telefonía y televisión en todo el Mercosur, con una cobertura que llega a las Islas Malvinas y buena parte de la Antártida Argentina. 

Matías Bianchi, presidente de la empresa ARSAT, contó a Radio Nacional que el satélite lleva configurados todos los canales que hoy son transmitidos por la Televisión Digital Abierta. Al respecto, afirmó que el satélite “viene a reemplazar servicios por los que hoy la Argentina debe pagar”. Asimismo, agregó que también “será utilizado para cubrir los servicios de telefonía o Internet en lugares remotos como por ejemplo un cajero automático o un teléfono satelital”, lo cual “hará posible que desde cualquier lugar de la Argentina, una persona pueda orientar una antena satelital común hacia ARSAT-I y así podrá ver sin tener que pagar absolutamente nada, todos los canales de la T.D.A.”

Sin embargo, los que se ilusionaron con que el nuevo satélite soluciones los problemas con las comunicaciones de los celulares de nuestro país, deberan bajar las expectativas: la puesta en funcionamiento del satélite no resolverá los problemas de comunicación en las redes de telefonía celular.