Sin mujeres, con un fiscal general con un mandato que se extenderá tres años más allá de cuando Juan Schiaretti deje de ser gobernador y con escasa y nula experiencia en el ‘barro’ del fuero Penal, quedará conformada la Fiscalía General si la postulación de Juan Manuel Delgado atraviesa satisfactoriamente las instancias previas a su asunción como nuevo titular del Ministerio Público Fiscal de Córdoba. Es solo una parte de la foto que propone su candidatura, pero es también una parte esencial.
En los últimos años Marta Cáceres de Bollati fue excepción en dos aspectos: es mujer y civilista; pero estuvo a cargo de la Fiscalía General a partir de que ya trabajaba en la oficina como adjunta. El resto fueron todos penalistas hombres: Miguel Ortiz Pellegrini, Marcelo Brito, Darío Vezzaro, Alejandro Moyano. Los tres primeros abogados litigantes y el último, de carrera judicial.
Sin mujeres. En el presente, hay tres fiscales adjuntos: José Gómez Demmel, Héctor David y Pablo Bustos Fierro. Continúa vacante el cargo que dejó el año pasado Alejandra Hillman y por el momento no se piensa en postular a alguien en su lugar, admitió el ministro de Justicia, Julián López.
Sin experiencia penal. Es esencial en la función del fiscal General el diseño de políticas criminales, muchas acuciantes: inseguridad, violencia de género, violencia institucional, judicialización de la política, etcétera. Delgado no cuenta con antecedentes en este campo.
Un examen posible. Dos años atrás, cuando Moyano se jubiló y habilitó la vacancia en la Fiscalía General un grupo de organizaciones, como el Instituto de Estudios Comparados en Ciencias Penales y Sociales (Inecip), la Asociación Pensamiento Penal Córdoba, Fundeps, Agora y otras, emitieron un documento sobre los criterios para designar al sucesor. Bien puede ser traído al presente para someter al candidato actual a una evaluación objetiva.
A la luz de aquel pronunciamiento van algunas preguntas para la postulación de Delgado
—¿Prevalecen criterios de mérito e idoneidad, antes que cuestiones de afinidad o preferencias personales?
—¿Son suficientes los pergaminos de su carrera docente universitaria? Según la web de la Facultad de Derecho de la UNC tiene cargo de profesor ayudante en la cátedra de Derecho Bancario, Del Mercado de Capitales y De los Seguros. En la Universidad Católica, también según un curriculum vitae que figura en su página, tras egresar en 1995, estuvo como docente contratado tres meses en 2017 y como titular en 2018 y 2019. En la publicación no se especifica la materia.
—Se puede decir que sí tiene experiencia en conducción de equipos, al estar ahora al frente de la Procuraduría del Tesoro de la Provincia, pero ¿podrá liderar una tropa de fiscales esparcidos por toda la Provincia donde el Fuero Penal tiene un peso desequilibrante?
—¿Tiene compromiso con valores democráticos y derechos humanos, en particular perspectiva de género? En 2002 junto a Aurelio García Elorrio suscribió una acción judicial para prohibir la venta de la ‘píldora del día después’.
—¿Qué proyecto tiene para el fuero Anticorrupción, cuestionado por su ineficiencia hasta por miembros del TSJ? De la agenda a la cual pudo acceder este medio sobre los proyectos que analiza el futuro fiscal General, no hay mención al tema. En Córdoba, sin fiscales que acusen delitos de corrupción nunca podrán abrirse investigaciones serias.