Las tareas de cobro siguen siendo un punto crítico para muchas organizaciones: pagos que llegan tarde, procesos manuales que consumen tiempo y usuarios que reclaman más comodidad. En ese contexto, cada vez más instituciones están optando por digitalizar su recaudación, no como una moda, sino como una necesidad concreta para mejorar la gestión.
Durante los últimos años, la adopción de plataformas de cobro digital creció en todo el país. Clubes de barrio, municipios, empresas medianas y grandes, consorcios, fundaciones. La lista es larga y diversa, pero el objetivo es común: ordenar los ingresos, facilitar el pago a los usuarios y reducir los tiempos que antes se iban en tareas administrativas.
En ese escenario, Pago TIC se consolidó como una de las soluciones más elegidas. Su plataforma permite cobrar a través de múltiples canales –como QR, links de pago, débito automático, transferencias bancarias y tarjetas– y automatiza tareas que antes requerían seguimiento manual, como los recordatorios o la generación de comprobantes.
Más control, menos errores: cuando los datos y la seguridad son parte del sistema
Los números acompañan la tendencia: según el Estudio Anual 2024 de la Cámara Argentina de Comercio Electrónico, la facturación del eCommerce creció un 181%, superando ampliamente la inflación. No se trata solo de un cambio de hábito en los consumidores, sino de un entorno que favorece el uso de herramientas digitales también en el cobro de servicios e impuestos.
Para muchas organizaciones, incorporar una plataforma como Pago TIC significa poder trabajar con datos actualizados en tiempo real, eliminar el riesgo de errores manuales y tener un mayor control sobre la tesorería. Lo que antes era una suma de planillas, llamadas y depósitos bancarios, ahora se centraliza en un solo sistema, accesible desde cualquier dispositivo.
Otro punto clave es la seguridad. Pago TIC opera como Plataforma de Servicios de Pago (PSP) y cuenta con la certificación internacional PCI DSS Nivel 1, que garantiza la protección de datos sensibles como los de tarjetas de crédito y débito. Además, desde 2022 tiene la certificación ISO 9001:2015 en atención al cliente, lo que refuerza la calidad del servicio para los pagadores.
El equipo de soporte trabaja con un enfoque omnicanal y personalizado, y se destaca por combinar el conocimiento técnico con una atención cercana, que entiende las particularidades de cada institución. En muchos casos, eso se traduce en mejores resultados de recaudación y una experiencia más fluida para los usuarios que abonan.
Por fuera del plano operativo, la empresa también decidió involucrarse con una agenda ambiental. Desde hace tiempo mide y compensa su huella de carbono, y se propone como proveedor sostenible dentro del ecosistema de pagos digitales. No es un aspecto menor: buena parte de las instituciones con las que trabaja valora este tipo de compromiso.
Digitalizar los cobros no es una solución mágica, pero sí una forma concreta de trabajar mejor. Gana tiempo quien cobra, se ordenan las finanzas y mejora la experiencia de quien paga. Y cuando esos tres factores se combinan, lo que sigue es crecimiento.
Para conocer más sobre las soluciones que ofrece Pago TIC, se puede visitar pagotic.com o escribir a [email protected] para recibir atención personalizada.