ECONOMIA
HIZO LA MAYOR VENTA EN SIETE MESES

El BCRA redobla esfuerzos para que el dólar no caliente más los precios

La obsesión de la entidad a cargo de Federico Sturzenegger es que la divisa norteamericana no se mueva y sea un ancla para la inflación.

Federico Sturzenegger, presidente del Banco Central de la República Argentina
Federico Sturzenegger, presidente del Banco Central de la República Argentina | Noticias Argentinas

La obsesión del Banco Central es que el dólar no se mueva y sea un ancla para la inflación. Y para ello vende lo que haga falta. Ayer vendió US$ 413 millones, el mayor desembolso de los últimos siete meses, para mantener estable el precio de la divisa que cerró en el segmento minorista a $ 19,83 para la compra, y $ 20,53 para la venta, lo que implica una baja de seis centavos respecto al día anterior, según el promedio elaborado por la entidad monetaria.

La rueda arrancó con rumbo alcista hasta alcanzar los $ 20,66, pero cuando el Banco Central apareció en la cancha, luego de tres días de ausencia, la tendencia se frenó y empezó el camino descendente.

En el mercado mayorista, la divisa finalizó en $ 20,10 para la compra, y $ 20,10 para la venta, 14 centavos por debajo del jueves.

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La cifra desembolsada en la jornada superó con creces los US$ 385,5 millones que la autoridad monetaria había distribuido durante la semana pasada para afrontar el recalentamiento del dólar, que registró un récord de $ 20,69. La anterior intervención fuerte había sido el viernes 9 de marzo con ventas por 212,5 millones.

Así, el BCRA inyectó en la plaza cambiaria en los últimos diez días 935,5 millones de dólares, y jugó en seis ruedas para contener el billete norteamericano en un valor que no se escape mucho más allá de $ 20,50.

El lunes 5 de marzo activó su participación por primera vez en el año, y la única en siete meses, dado que la anterior jugada fuerte había sido en agosto de 2017, previo a las PASO por la incertidumbre electoral, cuando había inyectado unos 1.800 millones.

La reciente estrategia intervencionista generó desconcierto y críticas en el mercado, que lo ve como una flotación sucia y no libre.

En este escenario, el martes último, cuando el Consejo de Política Monetaria del Banco Central decidió mantener estable la tasa de referencia en 27,25%, la entidad conducida por Federico Sturzenegger defendió su accionar.

“Luego de la pronunciada depreciación observada desde diciembre, durante las últimas semanas el peso siguió mostrando signos de debilidad. El BCRA decidió intervenir para sostener el valor de la moneda, en la convicción de que, en las condiciones actuales, una depreciación mayor a la ya ocurrida no estaría justificada ni por impactos económicos reales ni por el curso planeado de su política monetaria y que, de no evitarse, tendría el potencial de ralentizar el proceso de desinflación”, fundamentó.

También ratificó su “esquema de flotación cambiaria con intervenciones ocasionales, como complemento de su política monetaria, ante dinámicas disruptivas capaces de alterar la marcha de la inflación o de generar efectos negativos en las condiciones financieras”.