Ya no habrá “mega fiestas” en mega salones; ya no cantarán famosos artistas; no habrá fuegos artificiales para nadie; ni afamados conductores animarán ninguna noche. Ahora las compañías del sector financiero celebrarán el fin de año con un brindis austero alrededor de los escritorios.
Según publicó hoy El Cronista, la crisis obliga a los bancos locales a explorar fuertes campañas de ahorro y austeridad, por órdenes que reciben de sus propias casas matrices. “La suspensión de los eventos de fin de año ya está prácticamente decidida en una buena parte de las entidades locales. Hace unos días, por ejemplo , la casa matriz del Citigroup ordenó cancelar todos los preparativos que se estuvieran llevando adelante, en todo el mundo, para las fiestas de fin de año”, contó el matutino.
En el Hipotecario, planean reemplazar su tradicional fiesta de cierre – que suele hacerse en La Rural u Opera Bay, por un “brindis” a realizarse área por área, en el propio lugar de trabajo.
El ahorro forzoso al que deben someterse las entidades financieras no se limita, sin embargo, a los festejos. Los recortes se están haciendo también en el uso de energía y hasta en el consumo de papel.