Los jóvenes fans de la estrella del pop estadounidense Ariana Grande, que en muchos casos acudían por primera vez a un show, huían aterrorizados del Mánchester Arena mientras sus padres los buscaban de forma desesperada. La angustia reinó en el estadio que, según los testigos, parecía una carnicería.
Las redes sociales se llenaron de mensajes en los que se pedía ayuda para encontrar a allegados. En el vecino hotel Holiday Inn más de 40 muchachos esperaban a sus padres, supervivientes de una matanza perpetrada por un kamikaze que dejó 22 muertos y 59 heridos.
"El pabellón se quedó pavorosamente en silencio durante cinco o seis segundos, que parecieron más largos, y luego todo el mundo corrió en todas direcciones", explicó a la agencia AFP Kennedy Hill, una adolescente que asistió al concierto de la artista estadounidense. Su madre, Stephanie Hill, dijo que la gente perdía zapatos y teléfonos por el camino al tratar de huir del lugar: "Había muchos niños y adolescentes como mi hija en el concierto. Es trágico", lamentó.
"Se oyó una gran explosión y luego vi humo", contó otro testigo de la tragedia, Ryan Morrison, de 19 años, al diario Manchester Evening News. "Alguien gritó '¡bomba!, y todo el mundo empezó a correr. Fue una carnicería", añadió.
"Escuché un gran estruendo y entonces todos empezaron a correr hacia nosotros gritando y llorando. Todos nos pisotearon para lograr salir", describió a la cadena BBC Jessica. "Todo el mundo era presa del pánico", relató a la cadena Sky News Isabel Hodgins, una actriz que también estaba en el lugar. "El pasillo estaba lleno y olía a quemado, había mucho humo en el momento en que nos fuimos", recordó.
Elena Semino, que esperaba que saliera su hija de 17 años, dijo al diario The Guardian que también resultó herida: "Sentí como un fuego en el cuello y cuando levanté la vista había cuerpos por todos lados", dijo.
Gary Walker, procedente de Leeds, precisó en declaraciones a la BBC que había recibido trozos de metralla y que su mujer tiene lesiones en el estómago: "Escuchamos la última canción y después de repente hubo un gran destello, un estruendo y salió humo". Su hija, Abigail contó la dificultad que encontró para salir del lugar: "Tenía que asegurarme de que tenía a mi hermana. La agarré y la tiré con fuerza. Todo el mundo corría y gritaba. Fue absolutamente aterrador", resumió.
"Nunca había estado tan asustada en toda mi vida. Mi hija está muy, pero muy conmocionada", lamentó Cheryl McDonald, que asistió a la actuación con su hija de nueve años en diálogo con cadena Sky. La mujer describió que la escena tras el incidente era "devastadora" y que el lugar "estaba lleno de niños".
Las víctimas fueron trasladas a ocho hospitales de la ciudad y en ellos, los familiares esperaban conocer el estado de sus allegados. Sin embargo, hay mucha gente que aún no fue localizada. "Mi hermano sigue desaparecido. Acabe esto como acabe, estaré ahí, al lado de mi ciudad. No hay nada más que podamos hacer excepto estar juntos hoy", escribió Dan Hett (@danhett) sobre su hermano Martin, difundiendo los llamamientos a donar sangre.
Una pareja de adolescentes, Liam Curry y su novia Chloe, seguían desaparecidos. El primo del chico explicó a radio Heart que "Liam perdió a su padre hace un par de meses, así que andaban haciendo cosas para sobrellevar el duelo, entre ellas ir al concierto". "Todo el mundo creía que iban a pasar in momento feliz, hasta que nos despertamos esta mañana", lamentó.